El selectivo de la Bolsa de Tokio borra en una sesión el
batacazo que sufrió ayer y que dejó su cota en mínimos de 26 años. Ha sumado un
6,4% en la sesión, hasta los 7.621 puntos, animado por un yen más debilitado
que en las sesiones precedentes.
Las noticias sobre un posible recorte de tipos para la
próxima semana que adelantó claramente Jean-Claude Trichet, el presidente del
BCE, no logró calmar a los mercados europeos ni a los estadounidenses.
En Japón, sin embargo, los tintes bajistas se sustituyeron
por unos ánimos renovados que lograron borrar por completo el desplome del día
anterior. Aquí, el ministro de economía Kaoru Yosano restó importancia a la
necesidad de bajar los tipos en este país, actualmente en el 0,5%, ya que el
impacto sobre su economía podría ser mínimo. El Banco de Japón tomará el
viernes su decisión de tipos y no se espera ningún movimiento en el precio del
dinero.
El principal motor del avance en la sesión de hoy ha sido el
freno del 'rally' experimentado por el yen en las últimas sesiones. La divisa
nipona marcó máximos de 13 años frente al dólar, al mismo tiempo que rebotó más
de un 10% frente al euro. El dólar se rebotó un 2,9% frente al yen, hasta las
95,41 unidades. La divisa comunitaria se apreció un 3,6% en su cambio con el yen,
hasta los 119,99 yenes y deja atrás los mínimos de seis años y medio marcados
en la sesión de ayer, cuando tocó los 116,62 yenes en el mercado electrónico.
Entre las empresas protagonistas de esta sesión, ha
destacado Honda Motor, cuya cotización se disparó un 13,96% pese a anunciar una
caída de sus ganancias del 19,1% en el primer semestre del año fiscal, hasta
302.900 millones de yenes.
Otro de los valores destacados fue Nomura, el mayor broker
japonés, que rebotó un 1,2%, pese a anunciar pérdidas de 72.900 millones de
yenes (608 millones de euros) en el tercer trimestre que han sido mucho peor de
lo esperado por los analistas consultados por Bloomberg, que adelantaron que
sus pérdidas serían de 9.000 millones de yenes.
El resto de mercados asiáticos también lograron escapar de
la quema de las sesiones precedentes. El MSCI Asia-Pacific logró esquivar los
números rojos que se extendían durante cinco días y rebotó un 1,8%. Un avance
que queda lejos del descalabró del 60,7% que acumula en el año.
Y la euforia se desató en Hong Kong, que se disparó un 6,1%
después de hundirse un 12% en la jornada de ayer, y experimentó la mayor subida
en un sólo día desde 1997. En Corea del Sur el Kospi se anotó un 5,6%, aupado
por los valores tecnológicos como Samsung Electronics.