El crecimiento económico y el gasto fiscal fueron los ejes que se tomaron la intervención del CEO de BTG Pactual Chile, Juan Guillermo Agüero, en el más reciente seminario de la firma. Para el principal ejecutivo del banco de origen brasileño, tras un consenso en que la expansión de las economías es clave para los avances del país, es momento de “pasar a la acción”.
“Es un gran avance que después de las propuestas refundacionales, hoy se reconozca que el crecimiento económico es una condición necesaria para alcanzar mejores estándares de vida de nuestros compatriotas”, destacó Agüero.
Así, para el ejecutivo, “ahora falta construir acuerdos sobre lo que debemos hacer, es decir, para pasar a la acción”.
En esta línea, detalló que los mayores desafíos del país se encontrarían en la seguridad pública, recuperar la inversión y “revertir el deterioro institucional que hemos tenido en las últimas décadas”.
Gasto fiscal
En tanto, “la menor actividad económica no solo afecta a los ingresos de las familias, también afecta las finanzas públicas”, añadió Agüero.
“La sostenibilidad fiscal se ha debilitado en el último tiempo, ya que se ha hecho imposible financiar el crecimiento del gasto con ingresos tributarios que crecen relativamente poco”, apuntó. Escenario que se habría potenciado por una recaudación menor a la esperada de las últimas reformas tributarias, “en parte porque han afectado el crecimiento económico”, afirmó.
“¿Qué significa esto en la práctica? El problema es que hemos creado un Estado, en cierta forma, benefactor, que hemos profundizado con la gratuidad en la educación, en la salud, la PGU y una serie de otros beneficios que no tienen el financiamiento necesario”, señaló el CEO de BTG. Y este escenario “se profundizará por el problema demográfico”, alertó.
“Las consecuencias de no revertir este deterioro de las finanzas públicas serían graves y las pagaríamos todos a través de mayor riesgo soberano, mayores tasas de interés y eso afectaría nuevamente el déficit y el crecimiento, que es el clásico círculo vicioso de los países latinoamericanos que los vuelve más vulnerables a los shocks externos”, subrayó.
Estado y sistema político
Para revertir el panorama, aseguró Agüero, existiría consenso en la necesidad de una modernización del Estado y una mayor eficiencia en el gasto fiscal.
“Esto obviamente tiene un costo político alto, no es fácil de hacer, porque hay que reducir el gasto en personal, racionalizar programas que están mal enfocados o priorizar”, reconoció, pero que “es un camino que vemos que otros países de la región están siguiendo cuando el Estado ha tenido un crecimiento más allá del sector privado”.
En esta línea, Agüero concluyó que “el Estado no debe ser un obstáculo para el crecimiento de este país y necesitamos un Estado moderno que entregue más y mejores servicios a los ciudadanos y que sea parte de una sociedad que genera riqueza, basado en un sector privado, dinámico y competitivo”.
Finalmente, realizó un análisis del estado de la política chilena, la que “ha tenido dificultad en anticipar y capitalizar las demandas ciudadanas”, criticó.
“Se podría decir que en varios aspectos ha fallado, en parte, porque la existencia de 23 partidos políticos hace que la política sea ingobernable”, alertó.