El valor de la demanda mundial de oro se
mantuvo por encima de los US$ 100.000 millones en Estados
Unidos por segundo año consecutivo, pese a las turbulencias
registradas en los mercados financieros y de materias primas.
Según el último informe sobre tendencias de la demanda publicado
por el Consejo Mundial del Oro, la cotización media del metal fue de
US$ 973,25 la onza, lo que equivale a un incremento de 12% con respecto a 2008.
La demanda de oro total identificable en toneladas disminuyó, sin
embargo, en un 11% en 2009 hasta 385,8 toneladas frente a
los niveles excepcionales alcanzados el año anterior.
Se registró en cambio un incremento progresivo de la demanda en
la joyería e industria tras un primer trimestre débil, así como un
aumento también de la demanda de las inversiones en el metal.
Frente a los resultados extraordinarios del cuarto trimestre del
2008, los tres primeros meses de 2009 registraron una caída de la
demanda total del 24% en tonelaje.
Sin embargo, durante ese mismo periodo la cotización media del
oro llegó a US$ 1.099,63 la onza, lo que representa un alza de
38% con respecto al último trimestre de 2008.
El incremento de la demanda registrado en el sector de joyería se
debió sobre todo a la recuperación del mercado indio, que logró
conservar su posición predominante de consumidor de oro en el
mercado mundial, aunque China fue en 2009 el único mercado de
joyería en crecer (un 6%).
Según Aram Shishmanian, director del Consejo Mundial del Oro,
"mientras se reducían las inversiones excepcionales registradas en
el primer trimestre (de 2009), la demanda total anual lograba
mantenerse gracias a la mayor demanda de la joyería y la industria".
"Los principales motores de la demanda y de la oferta de oro
aseguran un equilibrio único frente a la volatilidad y a la
incertidumbre económicas", afirmó Shishmanian, citado en un
comunicado del Consejo Mundial del Oro.