Mucho tiene que opinar el Banco Central sobre los servicios mínimos de la banca en caso de huelga, y es que el ente emisor tiene el mandato de velar por el normal funcionamiento de los sistemas de pago. Aprovechando el Informe de Estabilidad Financiera (IEF) es que el ente emisor emitió su opinión, más aún cuando a fin de año se espera la primera negociación colectiva grande en la banca bajo la nueva ley laboral: la de BancoEstado.
De esta forma, el Central indicó que las huelgas en los bancos, considerando su duración y los procesos que queden suspendidos “pueden llegar a ser una fuente de riesgo sistémico. En consecuencia, una apropiada administración de este tipo de situaciones debe concitar la mayor atención de las autoridades.
El ente ejemplifica la importancia de establecer de mejor forma los servicios mínimos de los bancos para no afectar la cadena de pagos y la prestación de otros servicios financieros fundamentales para el desenvolvimiento de la economía y la consiguiente atención de necesidades básicas de la población o de grupos y sectores específicos de ésta.
“Por ejemplo, las personas confían en que podrán disponer de los recursos depositados en ellas, como sus sueldos, beneficios o ahorros, cuando lo requieran, y que los medios de pago con que cuentan serán aceptados cuando los utilicen”, sostiene.
Los servicios mínimos
Con lo anterior, la entidad dirigida por Mario Marcel indica que es de primer orden que la gestión de liquidez del banco y las áreas que intervengan directamente en los sistemas de pago se mantengan funcionando. En este último punto entran directamente los servicios de cajas, canje de cheques, custodia de valores, entre otros.
Además el Banco Central considera que las áreas de informáticas que permiten la continuidad de los sistemas de cajas, plataformas de internet, back office, call center y otros, también deben estar dentro del contexto de servicio mínimo.
“Una interrupción en la provisión de estos servicios puede generar disrupciones importantes tanto para la entidad financiera como para sus clientes y el interés público”, dice el documento.
Finalmente, para el Central -y que puede ser uno de los puntos que más se discutan entre trabajadores y empresa- deben seguir operando en caso de huelga algunas de las áreas comerciales, especialmente las que se dedican a la cobertura de riesgos, el otorgamiento de créditos y la captación de fondos públicos.
El emisor argumenta que si bien son varios los bancos los que operan en la plaza local, “la sustitución de un proveedor por otro no siempre es perfecta ni es factible en el corto plazo”.
Central da apoyo a la SBIF
El informe también da un espaldarazo a la Superintendencia de Bancos al sostener que la opinión del regulador debe ser considerada en la determinación de los servicios mínimos, “por cuanto este organismo cuenta con la mejor capacidad y experticia para aportar una evaluación técnica acerca de los servicios específicos en cada banco, que deberían ser objeto de calificación de servicios mínimos y confirmación obligatoria de equipos de emergencia”.
Finalizó la presentación el Banco Central sosteniendo que esta discusión también se debe dar en otras entidades financieras como: cooperativas de ahorro y crédito fiscalizadas por la SBIF, emisores y operadores de tarjetas de pago de general aceptación, sociedades de apoyo al giro bancario, administradoras de fondos de pensiones y compañías de seguros, entidades de depósito y custodia de valores, cámaras de compensación y entidades de contraparte central, entre otras.
AVANCES EN LA LEY DE BANCOS
En su discurso ante la comisión de Hacienda del Senado donde expuso sobre el IPoM y el IEF, el presidente del Banco Central, Mario Marcel, destacó los avances que han existido en regulaciones como por ejemplo, la reciente creación de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), lo que a su juicio "contribuye un cambio muy significativo en la estructura de regulación y supervisión financiera del país, y cuya implementación supone un importante reto de política pública.
Pero va más allá, ya que indica que "el camino a recorrer aún presenta importantes desafíos".
En lo concreto, Marcel indicó a los senadores que lo más inmediato es el envío al Congreso de la nueva Ley General de Bancos (LGB).
El presidente del ente emisor destacó que esta iniciativa genera una mayor convergencia con los estándares internacionales sobre requerimientos de capital bancarios definidos por Basilea III, además sostiene que resolvería un rezago que ha mantenido al sistema bancario a través de un mejoramiento de los mecanismos para administrar bancos en problemas financieros. Eso sí, pidió a los senadores presentes que una vez que el proyecto ingrese al legislativo, "es deseable que reciba la atención necesaria y pueda avanzar en su tramitación a pesar de los proceso políticos que caracterizarán los últimos meses de este año".
