El cobre terminó junio con un retroceso mensual de 0,58% al cerrar ayer las operaciones a un valor de US$ 3,1547 la libra en la Bolsa de Metales de Londres (BML). Con este resultado, la materia prima acumuló una disminución en su valor de 5,94% en los primeros seis meses del año.
La libra del metal rojo anotó su valor máximo en la primera sesión de 2014, cuando se cotizó en US$ 3,37450, mientras que el mínimo lo marcó a mediados de marzo cuando disminuyó hasta US$ 2,91864. De esta forma, el promedio en lo que va del año se ubica en US$ 3,13702.
“Luego de registrar en marzo los niveles más bajos en tres años y medio hasta los
US$ 2,94 la libra producto de una desaceleración económica de China -principal consumidor mundial del metal-, el commodity recuperó terreno lentamente gracias a una caída en los inventarios de la BML tras una menor producción de China e Indonesia”, destacó José Giraz, analista de commodities de xDirect.
De hecho, los inventarios de cobre de la BML se encuentran en los niveles mínimos desde agosto de 2008, y en lo que va del año han retrocedido un 57,79% hasta cerrar el lunes en 154.675 toneladas métricas.
Giraz señaló que de continuar este comportamiento en los inventarios, el precio del cobre seguirá al alza en los próximos meses, aunque acotó que la reducción de las existencias en Londres se debe a una mayor oferta y no a una mayor demanda por el metal.
“Considerando lo anterior, nuestras perspectivas para el metal industrial para lo que resta del año se ubican entre los US$ 3,23 y US$ 3,13 la libra. Una vez incrementen la producción Chile, Indonesia y China, los inventarios se recuperarán y el precio podría ubicarse cercano a los
US$ 3,05 - US$ 3,10 por libra”, sentenció el analista de xDirect.