Moody's Investors Service puso en
revisión para posible alza la calificación en moneda extranjera de los bonos de
gobierno de Chile (A2), no obstante, que condiciones externas adversas están
propiciando un giro hacia una baja en el nivel de actividad económica. A la
par, Moody’s asignó una perspectiva positiva a la calificación en moneda local
de los bonos de gobierno (A1).
Los techo país para bonos en moneda extranjera (Aa3) y para
depósitos bancarios en moneda extranjera (A2) también han sido puestos en
revisión, mientas que los techos país para bonos y depósitos en moneda local no
serán afectados por esta revisión.
"En comparación con gobiernos de otros países calificados
por Moody’s, Chile parece estar mejor posicionado para enfrentar dificultades
derivadas de un ámbito global adverso desde el punto de vista económico y
financiero", comentó Mauro Leos, Vice President-Senior Credit Officer de
Moody's.
"El proceso de revisión de las calificaciones habrá de involucrar una
evaluación comparativa del perfil crediticio del gobierno chileno, además de
explorar las posibles implicaciones de escenarios alternativos que pudieran
afectar de manera negativa el desempeño económico y financiero del país", agregó.
"En
base a ello", indicó Leos, "Moody’s espera determinar si la fortaleza
crediticia del gobierno chileno está en línea con aquella asociada a gobiernos
que poseen calificaciones soberanas más elevadas".
Leos señaló que el balance financiero del gobierno chileno
refleja su condición de acreedor neto, lo cual constituye una fortaleza
crediticia intrínseca. Adicionalmente, el perfil crediticio soberano
incorpora un marco de política económica que permite mitigar las
vulnerabilidades a las que se encuentra expuesto Chile, una economía pequeña y
abierta. Estos factores, en combinación con la fortaleza financiera del
sistema bancario chileno, contribuyen a limitar tanto volatilidad
macroeconómica esperada como susceptibilidad a riesgos crediticios.
"Durante el proceso de revisión, evaluaremos en qué medida
la acumulación de activos extranjeros por parte del gobierno ha venido a
fortalecer la capacidad del país para enfrentar choques externos
adversos, así como la habilidad del gobierno para cubrir contingencias fiscales
futuras, incluyendo aquellas que pudieran emanar del sector financiero y de la
balanza de pagos", continuó Leos.
Se señaló que el propósito fundamental de la al revisar las calificaciones
soberanas es determinar si el perfil crediticio de Chile justifica posicionar
la calificaron en una categoría más elevada para de esa manera reflejar las
fortalezas crediticias subyacentes en comparación a otros gobiernos que
pudieran no ser tan resistentes a los retos que plantea la crisis financiera
global.