El boom del sector hotelero, que en el último año ha convocado a
varios grupos extranjeros a invertir en Chile, sumará un nuevo actor.
Sin embargo, en esta oportunidad el inversionista será local.
Se
trata de los dueños de Tur Bus, la familia Diez, quienes acaban de
asociarse con la compañía francesa Accor para construir y explotar el
primer hotel de la cadena Ibis en el país.
En 2007, la firma gala anunció un plan para abrir en los próximos cinco años más de una decena de recintos a nivel local.
El
acuerdo que Accor suscribió con la familia Diez contempla que los
propietarios de Tur Bus aportarán el capital y el terreno para
levantar el hotel, que estará ubicado a un costado del terminal de
buses que operan en la comuna de Estación Central.
Por su
parte, la empresa francesa estará a cargo de operar el recinto y
adecuarlo a los estándares con los que Ibis, la cadena de dos
estrellas, funciona en otros países.
El gerente de proyectos
inmobiliarios e infraestructura de Tur Bus, Jaime Torrent, explicó que
la decisión de invertir en este primer proyecto se justifica en la
intención de la familia Diez de agregar valor a algunos terrenos que
posee en distintas ciudades de Chile, los cuales están en las
inmediaciones de terminales de buses y actualmente están en desuso.
El
ejecutivo agregó que aunque el acuerdo contempla únicamente este
proyecto -que ya fue ingresado al Sistema de Evaluación de Impacto
Ambiental (SEIA), las partes están evaluando ampliarlo a otros
recintos bajo la misma modalidad.
En efecto, la semana pasada
representantes de la familia Diez y de Accor se reunieron en la Segunda
Región para visitar el lugar donde la firma francesa tiene previsto
construir otro hotel Ibis.
“Sabemos del proyecto de Accor en
Antofagasta. El otro día estuvimos allá y visitamos el lugar donde
piensan construir. Si nos va bien seguiremos adelante, porque tenemos
varios terrenos disponibles y con posibilidades de uso para proyectos
Ibis”, explicó Torrent.
Agregó que entre las motivaciones para
potenciar este negocio figura el buen resultado que la familia Diez ha
tenido en la explotación de los hoteles que posee en los terminales de
buses de Talca y Santiago.
“Nuestros hoteles tienen una
ocupación cercana al 90% y el Ibis es un hotel muy barato. La idea es
que sea más económico que el nuestro, tiene una construcción muy
práctica y vamos a repetir ese modelo”, explicó Torrent.
Otra de
las razones que explican el interés de los dueños de Tur Bus por este
rubro es que, a juicio del ejecutivo, éste se alza como una buena
alternativa para rentabilizar su patrimonio.
“Es una solución
que se empezó a vislumbrar para poner los huevos en otra canasta y no
tener esos terrenos sin utilidad. Además, siempre estábamos presionados
y no preguntaban por la venta, pero la familia Diez mira hacia adelante
y este negocio implica dar una base más sólida a la familia y a sus
futuras generaciones”, manifestó Torrent.
Inversión y plazos
El
cronograma del proyecto contempla iniciar la construcción del hotel en
enero próximo, siempre y cuando no haya un nuevo traspié con el Estudio
de Impacto Ambiental, que la semana pasada fue desistido por un tema
formal, que está siendo ajustado y permitirá que pronto sea
reingresado al SEIA.
La construcción -dijo el ejecutivo- tardaría unos 10 meses, con lo cual el hotel abriría sus puertas durante el verano de 2010.
El recinto tendrá 264 camas, distribuidas en 132 habitaciones.
Además, se prevé habilitar cuatro locales comerciales aledaños al Ibis, los que serán arrendados a terceros.
Respecto a un eventual retraso en el proyecto, a raíz de la coyuntura económica, Torrent señaló que no cree que los afecte.
“Ante
esta situación esperamos que mucha gente se baje de los aviones y eso
ayuda a los servicios de buses y hoteles alrededor de los terminales”,
puntualizó el ejecutivo.