Como "una mala
decisión" y una "contradicción" con lo que se prometía durante
la campaña del ahora electo presidente, Sebastián Piñera, catalogaron los
diputados Marcelo Díaz (PS) y Renán Funtealba (DC) el que no se mantenga el
actual impuesto a la bencina, tal como lo anunció el futuro ministro de Economía,
Juan Andrés Fontaine.
Según Díaz, integrante de la Comisión de Economía de la Cámara Baja, se trata
de "una mala decisión y una mala política del futuro gobierno, porque una
de las grandes luchas que dimos durante el último año era poder bajar el impuesto
a los combustibles". Además, puntualizó que este tema fue en su momento,
"demandado y reclamado por la
Alianza", ya que "iba en beneficio de la clase
media".
En conversación con Orbe,
el socialista explicó que "el actual impuesto beneficia a quienes utilizan
los vehículos como una herramienta de trabajo. Es una medida que tiene,
claramente, un impacto anti empleo, por lo que lamento muchísimo que el futuro
gobierno decida mantener el alza al impuesto y no dejarlo en el rango que
está".
De igual manera opinó
Fuentealba, quien plantea que esta medida sólo traerá efectos negativos a la
clase media.
"Esta medida perjudica
a lo trabajadores que tienen su vehículo como medio de trabajo, a las pequeñas
y medianas industrias, a la clase media, de modo que por un lado le dan un bono
de $ 40.000 y por el otro le sacan la plata con ésta medida", afirmó el
vicepresidente DC.