La clasificadora Fitch Ratings aseguró en un informe que el cambio de gabinete no representa un giro significativo en la política económica y fiscal de Chile, sino mas bien es un proceso para fortalecer las reformas.
"El cambio de gabinete en Chile no anticipa un cambio significativo en la política económica y parece estar destinado a vigorizar la agenda del gobierno después de la caída de la popularidad de la presidenta", dice el documento.
"Nosotros no pensamos que el cambio represente un giro significativo en la política económica y fiscal. El nuevo ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, es un experimentado economista que antiguamente era presidenta del estatal Banco Estado y Fitch espera que el gobierno continúe el marco de política fiscal basado en normativas, incluyendo una progresiva consolidación fiscal destinada a lograr un balance fiscal estructural para 2018", precisa la clasificadora.
Pese a estos augurios, Fitch dice que "todavía está por verse si este cambio va a reenergizar los esfuerzos del gobierno para legislar las planeadas reformas laboral, educacional y constitucional".
"La consistencia de la predictibilidad de las políticas al igual que los fuertes estándares de gobierno representan una de las principales fortalezas de Chile", señalaron.
En ese sentido, reiteraron lo expresado a comienzos de mayo ,cuando reafirmaron la calificación de rating soberano de Chile, respecto a los casos de corrupción que han afectado al país.
"No vemos que los casos de corrupción provoquen un daño considerable o significativo a la fortaleza institucional de Chile a estas alturas, aunque podrían representar una prueba", expusieron.
Además, dijeron que están realizando acciones para sanar esta situación. "La justicia está conduciendo investigaciones, las autoridades están considerando propuestas que endurecerían significativamente las leyes sobre cómo se tienen que financiar las campañas políticas. Progresos en estas áreas podrían mejorar la confianza pública en las instituciones políticas chilenas", dijeron.