Marcel pone paños fríos a efecto de nuevo gobierno en expectativas y alerta sobre el mercado laboral
De cara al ambiente electoral, el economista reforzó el concepto de urgencia con el que se debe enfrentar el menor crecimiento del país.
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La primera semana de marzo suele ser intensa para la gran parte de los chilenos, incluidas las autoridades. Y así lo fue para el presidente del Banco Central, Mario Marcel, quien participó en tres actividades con representantes del mundo privado sin eludir ningún tema en su discurso e, incluso, se animó a dar su opinión sobre el escenario político.
A ocho meses de las elecciones presidenciales, economistas y políticos ya debaten sobre cuál será el efecto del nuevo gobierno en la alicaída actividad y si cambiarán o no las aún deterioradas expectativas de los empresarios, uno de los elementos que ha frenado la inversión en los últimos tres años.
En esa discusión, Marcel optó por poner paños fríos. “Evitaría saltar a conclusiones políticas muy directas, las expectativas son un fenómeno complejo. No deberíamos pensar que simplemente con un resultado tal o cual las expectativas van a cambiar de la noche a la mañana”, dijo ayer en un desayuno organizado por Asimet.
Fuerte y claro planteó que el mundo político tiene que pasar del discurso a la acción si quiere recuperar el dinamismo de la economía, e hizo un llamado directo a ese sector en un taller organizado por Libertad y Desarrollo (LyD) el martes. “Ojalá que a la mayor preocupación que manifiesta el mundo político por el crecimiento, se sume en los próximos meses un sentido de urgencia y un esfuerzo por concretar iniciativas que así lo aseguren”, expresó en esa oportunidad.
El economista reiteró el mensaje al día siguiente en un seminario organizado por la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), donde también estuvo invitado el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés.
Otras definiciones
Si bien Marcel se mostró preocupado por el momento actual de la economía, señalando que incluso el PIB del primer trimestre del año podría no superar el 0,5% obtenido en el último lapso de 2016, indicó que ve algunas oportunidades hacia la segunda parte del año, en el marco de un escenario externo más favorable.
En su opinión, las exportaciones y la inversión “tienen que liderar la recuperación del ciclo”, visión que respaldó con cifras. De acuerdo a cálculos del Banco Central, el país podría alcanzar un crecimiento promedio anual de 3,5% en el mediano plazo si se recupera la inversión, nivel que podría llegar hasta 4% si se incluyen mejoras de productividad y capital humano.
La situación del mercado laboral es otro tema que inquieta al presidente del ente rector, principalmente porque la creación de empleo asalariado se ha estancado e incluso caído en el margen, a lo que se suma un aumento de los inactivos y de quienes trabajan jornadas parciales.
“Cualquier debilidad adicional en el mercado del trabajo puede tener efectos relevantes sobre el consumo privado, especialmente cuando el crédito de consumo se desacelera en el margen”, advirtió.
Respecto a la inflación y la tasa de poltica monetaria -ejes de su labor a la cabeza del Central-, tampoco dejó espacio para dudas: la variación anual del IPC continuará descendiendo, incluso hasta niveles de 2% (hoy está en 2,7%), para volver a la meta de 3% en el horizonte de política.
Y ad portas de la reunión de política monetaria del jueves -para la cual el mercado espera una rebaja de la tasa-, recordó que el objetivo sigue siendo la estabilidad de precios y lo que justifica el sesgo expansivo de la tasa “es el riesgo de una inflación que se quede debajo de la meta, no que la economía crezca poco”.
Dejando de lado su semblante serio que lo ha caracterizado tanto en el instituto emisor como en su paso por el Banco Mundial, la OCDE, el BID y en sus trece años trabajando para el gobierno en distintos cargos, Marcel se mostró distendido en el evento de Asimet, tal vez por su cercanía a la industria de la metalmecánica, ya que su padre desarrolló negocios en el sector, “donde lo ví pasar por períodos de altos y bajos”, comentó .
“Cuando entré a estudiar economía, siempre me preguntaba por el futuro del dólar y, lamentablemente, yo nunca le daba una respuesta muy precisa y tampoco se la podría dar hoy”, bromeó Marcel.
Política Monetaria
El objetivo de la política monetaria sigue siendo, como siempre, la estabilidad de precios. Lo que hoy justifica su sesgo expansivo es el riesgo de una inflación que se quede debajo de la meta, no que la economía crezca poco".
Crecimiento
Con una recuperación de la inversión podríamos crecer al 3,5% y con mejoras en productividad y capital humano, probablemente podríamos ir un poco más allá".
Elecciones y expectativas
Evitaría saltar a conclusiones políticas muy directas, las expectativas son un fenómeno complejo. No deberíamos pensar que simplemente con un resultado tal o cual las expectativas van a cambiar de la noche a la mañana".
Empleo
Cualquier debilidad adicional en el mercado del trabajo puede tener efectos relevantes sobre el consumo privado, especialmente cuando el crédito de consumo se desacelera en el margen".
Su llamado
Ojalá que a la mayor preocupación que manifiesta el mundo político por el crecimiento, se sume en los próximos meses un sentido de urgencia y un esfuerzo por concretar iniciativas que así lo aseguren".