Fue secretario general y presidente de Renovación Nacional (RN), diputado del partido y ministro de la Segpres, de Desarrollo Social y de Vivienda del segundo gobierno de Sebastián Piñera y, posteriormente, convencional. Actualmente, ejerce en la academia como decano de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad del Alba, pero sigue muy ligado a la política, que lo apasiona, pues Cristián Monckeberg, integra la Comisión Política de la colectividad y desde esa privilegiada tribuna analiza la carrera presidencial y el devenir en su sector.
En esta conversación con Diario Financiero destaca las fortalezas de Evelyn Matthei como candidata, pero también admite los errores en los que, desde su punto de vista, se ha incurrido en la campaña. Y defiende el que la candidata haya optado por no avanzar en la denuncia contra republicanos en tribunales, pues está convencido de que “cuando la política resuelve sus problemas en tribunales, quiere decir que fracasó la política”.
-¿Qué le parece que finalmente se haya optado por no presentar la denuncia por la campaña sucia?
-Varias cosas… Creo que estamos en presencia de una muy buena candidata, que representa a Chile Vamos, que tiene experiencia, equipo, ideas, como es Evelyn Matthei. Pero por diferentes razones ha sufrido ataques bien duros, principalmente del Partido Republicano y de José Antonio Kast. Ese es el origen de todo esto. Por lo tanto, era muy necesario un disco pare a este tipo de campaña. Ahora, la pregunta es, ¿era necesario llegar a tribunales? Yo creo que no.
-¿Por qué no?
-Porque cuando la política resuelve sus problemas en tribunales, quiere decir que fracasó la política. Eso quiere decir que íbamos a poner a un fiscal a resolver los conflictos de un sector y, por lo tanto, no era una buena sugerencia. Es evidente que hay molestia, que hay tragos amargos y cosas cercanas a eventuales delitos que no se pueden dejar pasar. Evelyn hizo bien, Chile Vamos hizo bien. Pero llegar a tribunales era llevar las cosas a un extremo que uno sabe dónde empieza pero no dónde termina.
“Creo que a la UDI le falta convencerse de que estamos en presencia de una muy buena candidata, que es la mejor opción para el país”
-Dice, Chile Vamos estuvo bien, pero sólo RN estuvo detrás de Matthei en esta materia, pese a que la candidata milita en la UDI, ¿por qué el peso de una eventual denuncia se dejó en los hombros de RN?
-A partir de este episodio y con el tiempo que queda, que es bastante más que suficiente para desplegar una buena campaña, es importante que todos los partidos del pacto -Renovación Nacional, Evópoli, UDI, Amarillos y, eventualmente, Demócratas- entiendan que su candidata es Evelyn Matthei. Aunque suene de perogrullo, espero que lo entiendan y lo sientan con convicción. Eso significa desplegarse, trabajar junto a la candidata, significa desplegar vasos comunicantes con el equipo presidencial y hacer un esfuerzo fuerte para que la lista parlamentaria y la candidatura presidencial sean exitosas.
-¿Le parece que no ha sido así, que es necesaria esa advertencia?
-Es que no estoy viendo a la UDI con la fuerza que debería apreciarse en la campaña, cuando estamos en presencia de una candidata que es militante de ese partido. Este episodio es sólo un ejemplo de ese compromiso potente que yo esperaría de los partidos que apoyan la candidatura presidencial. Ésta, es una reflexión, un llamado de atención.
-Derechamente, siente que la UDI no está todo lo comprometida que debiera con la campaña de Matthei?
-Creo que a la UDI le falta convencerse de que estamos en presencia de una muy buena candidata, que es la mejor opción para el país. Y el convencimiento tiene que llevar a desplegarse de manera importante, porque no sólo se trata de la campaña presidencial, también está la elección parlamentaria que va de la mano y es un hecho -porque todos los números así lo indican- que va a haber dos grandes fuerzas principales: una, la que representa el Partido Republicano y otra que representa Renovación Nacional. Por lo tanto, la actitud de la lista parlamentaria de la UDI tiene que ser apoyar con convicción la candidatura de Evelyn Matthei y yo veo que en muchos de sus candidatos empieza el titubeo y eso es una pésima señal.
-Chile Vamos viene pidiendo hace meses a republicanos una lista única parlamentaria, ¿le acomodaría ir con el Partido Republicano?
-Lo que pasa es que llevar una o dos listas tiene una mezcla de cosas, por un lado, principios comunes, ideologías, ideas y, segundo, cálculo electoral. En el primer punto hay vasos comunicantes con muchas de los temas que ha planteado el Partido Republicano. Pero desde el punto de vista electoral hay que ser lo más eficiente posible. Si la izquierda termina yendo en una sola lista, lo lógico sería que nosotros hiciéramos un esfuerzo de ir en una sola lista. Pero como el Partido Republicano ha dicho en innumerables ocasiones que no quiere eso, hay que hacer un esfuerzo por buscar esa eficiencia electoral con omisiones en ciertas regiones.
-Que finalmente Matthei se haya echado para atrás respecto de la denuncia, ¿contribuye a avanzar en materia parlamentaria, una señal de unidad?
-Creo que ese paso atrás es una oportunidad para que el Partido Republicano entienda que en nosotros hay un genuino interés que no tenemos que demostrar, porque ya lo hicimos en la segunda vuelta presidencial de2021, de construir una mayoría potente que gobierne el país para los próximos cuatro años. Nos encantaría que fuera con nuestra candidata y vamos a trabajar para eso. Pero, si no, tiene que ser con el resto de la oposición y eso todavía no lo entiende el Partido Republicano. Y ahí vamos al tema de fondo…
“El Partido Republicano tiene que entender que para gobernar hay que ceder, pactar y no arrasar a tu, entre comillas, socio”
-Que, a su juicio, sería…
-El Partido Republicano puede ganar la elección y puede llegar a ser gobierno, pero qué va a pasar después de la borrachera del triunfo. Hay que gobernar. Y las lunas de miel ya no existen. Con el ambiente que veo entre las diferentes oposiciones, va a ser imposible llegar a un acuerdo de gobernabilidad por cuatro años. Entonces, el Partido Republicano tiene que entender que para gobernar hay que ceder, pactar y no arrasar a tu, entre comillas, socio. Y creo que hay una lógica de arrasar y terminar con todo lo que huela a Chile Vamos.
-Algunos analistas, pero también muy en privado en Chile Vamos hay quienes plantean que Kast es el genuino representante del sector, mucho más que Matthei, de ahí que el republicano haya crecido en las encuestas, ¿qué opina?
-Mira, es posible divagar o pensar que ahora va a gobernar la verdadera derecha, pero creo que es un ejercicio inútil. Nadie gobierna por sí solo y se requiere de vasos comunicantes, de entendimiento, de acuerdo y de mayorías en el Congreso. Ese es el esfuerzo que, a mi juicio, tiene que hacer republicanos y tiene que transmitir a su electorado que la paciencia de la ciudadanía es corta; por lo tanto, si en los primeros meses del próximo año, habiendo llegado al gobierno, no se actúa rápido, con acuerdo y con efectividad, cualquiera sea el gobierno que venga lo va a pasar muy mal.
-¿No ve a Kast como una persona capaz de generar puentes con otros sectores, ya no entre las derechas, sino con la que podría ser la próxima oposición?
-En los ejemplos recientes, claramente el Partido Republicano adolece de la aptitud para llegar a acuerdos. Y te pongo dos ejemplos: el Parlamento y la última Convención. Y el problema de fondo es que el mundo que gira en torno al Partido Republicano y a la candidatura de José Antonio Kast, cree que se las puede solo y que va a poder gobernar solo y eso es imposible. Para que un gobierno sea exitoso debe haber trabajo genuino de equipo y eso lo tiene que entender el Partido Republicano si está apostando a ser gobierno.
-¿A qué atribuye que Evelyn Matthei se haya estancado en las encuestas?
-Las razones pueden ser variadas, pero hay una relevante y es que se produjo una desconcentración respecto de lo que tiene que ser una candidatura presidencial: tiene que tener despliegue territorial, no politizarse, conexión con la ciudadanía, con las urgencias sociales, y propuestas macizas. Creo que eso se olvidó, se nubló, se enredó en las últimas semanas y ese es el esfuerzo al cual tenemos que enfocarnos. Y, segundo, que también es determinante, el triunfo de Jeannette Jara posicionó un extremo e inmediatamente polarizó la elección. En ese escenario, la actitud de José Antonio Kast y el orden en llevar su campaña le ha rendido frutos positivos.
-Desde finales de junio que comenzó a correr el rumor de que en Chile Vamos querían bajar a Matthei, ¿eso puede haber afectado también a Matthei?
-Lo que pasa es que todo es consecuencia de lo mismo. Cuando se pierde la brújula de la campaña y Chile Vamos la pierde, se distrae la campaña. Evidentemente con el nerviosismo por la baja en las encuestas empiezan las especulaciones. Nada peor para una candidatura y para un proyecto político que empezar con especulaciones de ese tipo. Nosotros tenemos una candidatura presidencial proclamada, que está desplegada y lo que corresponde es trabajar por esa candidatura hasta el último día antes de la elección.
-Dijo algo que me quedó dando vueltas, ¿por qué una candidatura no debiera politizarse, no son las campañas per sé políticas?
-Sí, pero cuando digo que se politiza me estoy refiriendo a que el conflicto político se toma la agenda de la campaña. Obviamente la campaña tiene que ser dirigida por políticos, por partidos y por gente que apoye ese esfuerzo, pero los conflictos políticos no pueden ser el eje de la campaña. Y creo que se cometió un error en ese sentido y se pagó caro. Las candidaturas exitosas son las que le hablan a la ciudadanía y entienden y empatizan con lo que la gente está esperando para los próximos cuatro años y, en el caso nuestro, eso se perdió durante un buen rato y es urgente recuperarlo.
-A su juicio, ¿era más fácil ganarle a Carolina Tohá que a Jeannette Jara?
-Desde el momento que Jara gana la primaria se polariza la elección y, por lo tanto, inmediatamente sus oponentes empiezan a mirar cuál es el candidato más polarizado que pueda enfrentar a Jara. Te aseguro que si hubiese ganado Carolina Tohá el escenario hubiese sido distinto respecto también de la oposición y de las candidaturas de la oposición. Eso deberíamos haberlo percibido, pero ese triunfo nos pilló a nosotros con un desorden político muy grande en la campaña, que aprovechó muy bien la candidatura de José Antonio Kast. Y eso nos pasó la cuenta, recuperable 100% con concentración y apoyando la candidatura como corresponde.
“La señal que da Evelyn Matthei, retrocediendo respecto de la denuncia en tribunales, es de dar un paso en la línea del acuerdo, el entendimiento y cierto grado de gobernabilidad con quienes no la han tratado bien”
-En un escenario donde todos dan por seguro que Jara y Kast son los que pasan a segunda vuelta, ¿podría darse el caso de que los candidatos al Congreso de Chile Vamos pudieran buscar respaldo en Kast?
-Quién sabe… soy un convencido que la fuerza parlamentaria de Renovación Nacional y de la UDI depende mucho del esfuerzo, la lealtad y el trabajo conjunto con la candidatura de Matthei. Si esto se transforma en un desorden, en sálvese quien pueda, el resultado parlamentario también puede ser bastante paupérrimo porque la ciudadanía va a ver que no hay coherencia en lo que se está proponiendo a nivel presidencial y lo que se está proponiendo a nivel parlamentario.
-Entonces, ¿qué debería hacer el comando y la propia Evelyn Matthei para revertir su posición en las encuestas?
-Primero, llegar a un acuerdo parlamentario rápido al interior de Chile Vamos, con amarillos y, eventualmente, con demócratas; esa es una prioridad que está bastante avanzada. Segundo, despejar un acuerdo con el resto de la oposición, entiéndase Partido Republicano y compañía, con los que podría haber acuerdo en torno a omisiones. Tercero, que es súper importante, apoyar con convicción la candidatura de Matthei y dejarse de titubeos, que he visto en algunos en la UDI. Y volver a la lógica de una candidata empática, con experiencia, todoterreno, con ideas, con equipo –que lo tiene- y de eso no hay que distraerse.
-Con todo lo que se ha visto hasta ahora entre las derechas, ¿podría asegurarle a la gente que la oposición da gobernabilidad?
-Este Gobierno lo ha hecho tan mal y, a mi juicio, la candidata Jara no es de las mejores, por lo que a pesar de los espectáculos carnavalescos y dantescos de las últimas semanas, la gente sigue esperanzada en que las oposiciones logren un buen gobierno. Eso es un desafío gigante y la paciencia se agota; por lo tanto, hay poco tiempo como para demostrar gobernabilidad, entendiendo que hay diferencias al interior de la oposición. Ahí hay un esfuerzo que hacer. Y creo que la señal que da Evelyn Matthei, retrocediendo respecto de la denuncia en tribunales, es de dar un paso en la línea del acuerdo, el entendimiento y cierto grado de gobernabilidad con quienes no la han tratado bien.