El
presidente de Renovación Nacional, Carlos Larraín, reconoció hoy que “dolió” la
salida de Ximena Ossandón de la Junji, aunque insistió en que hubo una “trampa”
en el proceso de postulación al cargo a través de la Alta Dirección Pública.
De cualquier
manera, el timonel del partido se mostró crítico respecto de los comentarios que
Ossandon hizo vía Twitter en la que calificó su sueldo como “reguleque”.
"Claro
que dolió (que la dejaran caer); dolió porque ella tenía un buen desempeño pero
lo oscureció con sus comentarios espontáneos, innecesarios", como el de
que su sueldo era "reguleque", que para Larraín fue "poco
prudente".
El presidente
de RN dijo a Cooperativa que "estaba este otro pecado original" que
fue su no postulación al cargo vía el concurso de la Alta Dirección Pública,
"no porque ella no quisiera o quisiera saltarse el procedimiento, sino
porque no se lo advirtieron, o sea ahí alguien le hizo una trampa".
En esto,
comentó "hay una cosa interesante", porque según explicó, "la
Junji estaba exenta del trámite de la Alta Dirección Pública por una resolución
de la Presidenta Bachelet de enero del 2007" suspendiendo su aplicación en
esa entidad y otras dos reparticiones "hasta nuevo aviso".