El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn,
afirmó hoy que las medidas de consolidación fiscal anunciadas recientemente por
España y Portugal van "en la dirección correcta" y aseguró que el
riesgo de que Hungría tenga que hacer frente a una suspensión de pagos "no
es real".
"Es evidente que muchos países necesitan acelerar su
consolidación fiscal y están ahora en el proceso de hacerlo, como por ejemplo,
Portugal y España", comentó el comisario al llegar a la reunión de
ministros de Finanzas de la zona euro, Eurogrupo, que se celebra hoy en
Luxemburgo.
Sin embargo, Rehn no quiso valorar en mayor detalle los
planes de ajuste presentados por Madrid y Lisboa, y recordó que la evaluación
definitiva de la Comisión Europea (CE) sobre estos programas se hará pública el
próximo 15 de junio, dentro del proceso habitual seguido con los países
inmersos en procedimientos por déficit excesivo.
Por otra parte, Rehn aseguró que la crisis de Hungría -cuyo
primer ministro, Viktor Orbán, sembró la alarma la semana pasada al agitar el
fantasma de una posible suspensión de pagos y posteriormente desdecirse-
"no es real" y la comparó con "boxear con la sobra de uno
mismo".
Rehn opinó que las afirmaciones sobre la situación de las
finanzas públicas del país magiar son "exageradas" y afirmó que las
medidas adoptadas por Hungría en los dos últimos años han contribuido a crear
una situación de consolidación fiscal.
Además, el comisario garantizó que la crisis relacionada con
Hungría "no tiene, desde luego, ninguna relación con España y
Portugal".