Por Constanza Morales H.
El mercado laboral en Estados Unidos parece haber perdido el impulso que había registrado a principios de año incluso antes de que se produjera el cierre del gobierno, aunque la tasa de desempleo disminuyó a su menor nivel en casi cinco años.
El esperado informe laboral de septiembre, que vio retrasada su publicación debido a la paralización de las agencias federales durante 16 días, reveló que las nóminas no agrícolas se expandieron en 148 mil en septiembre, informó ayer el Departamento del Trabajo. Los datos fueron recogidos dos semanas antes de la interrupción gubernamental, por lo que no reflejan los efectos de la suspensión.
La cifra estuvo muy por debajo de las expectativas del mercado de 180 mil y con ella se completan tres meses en que las empresas crearon menos puestos de trabajo que las estimaciones de los analistas, luego de una ganancia revisada de 193 mil en agosto y una modesta alza de 89 mil en julio.
De esta manera, la contratación neta de 143 mil personas al mes durante el tercer trimestre anotó una baja de cerca de 40 mil empleos respecto del promedio de los tres meses anteriores y corresponde al ritmo más débil desde el período marzo-junio de 2012.
En tanto, por tercer mes consecutivo, la tasa de desempleo retrocedió, hasta 7,2%, alcanzando su mínimo desde noviembre de 2008. Sin embargo, esta disminución podría deberse a que más ciudadanos han dejado de buscar empleo de manera permanente o que la pérdida de habilidades los convierte en personas no aptas para el trabajo.
La tasa de participación se mantuvo en 63,2%, con lo que permaneció en su menor nivel en 35 años.
Crecimiento modesto
Los débiles datos del mercado laboral sugieren que la recuperación de la primera economía del mundo todavía no es sostenida.
“No es como que estuviéramos cayendo desde un precipicio, pero hay un fracaso en conseguir una chispa en el empleo”, comentó a Bloomberg Michael Feroli, economista jefe para Estados Unidos de JPMorgan. “En los últimos tres meses, el ritmo de creación de empleo ha dado un paso hacia atrás”, añadió.
Por su parte, Cary Leahey, economista senior de Decision Economics, declaró a Reuters que “este informe sobre el mercado laboral suavizará las evaluaciones de la gente de las condiciones actuales”.
En esa línea, Sung Won Sohn, profesor de economía de California State University Channel Islands, manifestó a Reuters que “las cifras indican que la economía está creciendo a un ritmo modesto en el mejor de los casos”.
Efecto sobre la Fed
El decepcionante dato del mes pasado es la última señal que eleva las probabilidades de que la Reserva Federal postergue su decisión de comenzar a recortar el estímulo monetario hasta el próximo año.
“La pronunciada desaceleración en la contratación a sólo 143 mil por mes en el período julio-septiembre ha removido virtualmente cualquier posibilidad de una reducción en las compras de activos en la reunión de diciembre del Comité Federal de Mercado Abierto”, escribió en una nota Brian Jones, economista senior de Société Générale.
Stephen Stanley, economista jefe de Pierpont Securities, argumentó que “debido a que la economía está potencialmente en fluctuación y los datos para octubre y noviembre están sujetos a un inusual grado de distorsión”, los miembros de la Fed probablemente mantendrán las compras de activos por varios meses.
De acuerdo a una encuesta de Bloomberg publicada la semana pasada, los analistas esperan que el banco central rebaje las compras mensuales desde US$ 85 mil millones a US$ 70 mil millones en la reunión a mediados de marzo.
