Brasil, la nación futbolera más famosa del mundo, se ha ganado merecidamente la reputación de ser una fábrica de talentos y es el mayor exportador de futbolistas a nivel global.
En la búsqueda del próximo Neymar o Vinicius Junior, emprendimientos de tecnología deportiva en el país más grande de Sudamérica apuestan a que la inteligencia artificial jugará un rol clave.
Si ya la posibilidad de grabar y subir videos fácilmente a internet ha reducido la necesidad de que los cazatalentos asistan presencialmente a partidos o entrenamientos, la idea ahora es que la IA lleve el descubrimiento de jóvenes promesas a un nuevo nivel mediante el análisis automatizado de datos obtenidos desde clips grabados con teléfonos móviles.
Dado el enorme tamaño de Brasil y sus marcadas desigualdades, los entusiastas de esta tecnología también creen que estas innovaciones pueden ayudar a derribar barreras impuestas por la distancia y la pobreza para quienes sueñan con llamar la atención de los buscadores de talento.
Un TikTok para talentos
Footbao, que eligió Brasil como su campo de pruebas en 2023, es una especie de TikTok donde los jóvenes aspirantes crean un portafolio en línea con videos que muestran sus habilidades y características. La startup afirma que más de 100.000 jugadores en todo el mundo se han registrado en su aplicación móvil, la mayoría de ellos en Brasil.
Su inteligencia artificial actúa como un filtro inicial para sus analistas, quienes identifican perfiles que respondan a las demandas específicas de los equipos asociados. “Esto ayuda a los clubes a encontrar jugadores que se ajusten con mayor precisión a lo que necesitan, a escala nacional y con mucha más exactitud”, dice Nick Rappolt, director ejecutivo de Footbao.
La pasión de Brasil por el fútbol, su geografía extensa y su población de más de 200 millones de personas lo convierten en la “plataforma de lanzamiento perfecta”, agrega. “Creemos que el talento es universal, pero la oportunidad no, y eso es lo que queremos cambiar. Nuestro objetivo es ayudar a que los jóvenes deportistas cumplan su sueño de convertirse en profesionales”.
Ya siendo parte del plantel del club Corinthians de São Paulo cuando comenzó a usar Footbao, Glória Gasparini, de 16 años, fue convocada este año a la selección nacional para el campeonato sudamericano sub-17.
“La app me ha ayudado a tener más seguidores en mis redes sociales, y eso es esencial para motivar a otras chicas que tienen el mismo sueño que yo”, afirma.
Footbao afirma que recientemente envió a cinco adolescentes brasileños a pasar dos semanas entrenando con el Lecce, club de la primera división italiana. Fueron seleccionados de una lista corta de 20, elegidos a su vez entre un total de 2.000 postulantes.
El director ejecutivo del club de Apulia, Sandro Mencucci, señala que las plataformas de scouting tradicionales tienden a enfocarse en jugadores ya profesionales más que en los que están “en la calle”, y añade: “Footbao es distinto en su estrategia… puede ser muy útil”.
La joven compañía dice haber levantado € 5,8 millones en financiamiento, compuesto por una inversión semilla y luego € 5 millones adicionales este año. Fundada por el emprendedor italo-suizo Francesco Ciringione y por Boris Collardi, exCEO del banco privado suizo Julius Baer, Footbao asegura que ya está generando ingresos a través de servicios premium.
“Estamos ampliando otras fuentes de ingresos como la representación de talentos, el acceso a datos y analítica predictiva para los clubes, además de patrocinios y publicidad mediante nuestra aplicación y torneos”, añade Nick Rappolt, su CEO.
Puntuar habilidades
Brasil también es un foco para Cuju, una app desarrollada y financiada por el brazo tecnológico de Rogon, una agencia alemana de representación de jugadores. Una versión temprana, sin inteligencia artificial, fue probada en África hace casi una década, según Cuju, antes de lanzar su formato actual en Brasil el año pasado, con la misión de “democratizar” el acceso al fútbol.
Los usuarios realizan una serie de ejercicios para mostrar habilidades, como regate o disparo, y obtienen una puntuación. Los videos se suben a una base de datos donde la IA compara jugadores de todo el mundo y ofrece sugerencias para mejorar.
“Puedes comparar exactamente las mismas habilidades o ejercicios entre un niño en Brasil y uno en Malasia, Estados Unidos o África. Esto es estandarización pura y ayudará a que los clubes y scouts lo tengan más fácil en la búsqueda de nuevos talentos”, dice Sven Muller, director de marketing de Rogon Technologies.
Cuju no reveló información financiera, pero una persona cercana a la empresa dijo que recibió una inversión inicial de € 5 millones.
Ambas apps también organizan competencias en Brasil, lo que permite que los jugadores mejor calificados muestren su talento frente a cazatalentos. Cuju afirma que tiene 50.000 usuarios en el país, la mayoría en el estado de Santa Catarina, donde organiza un torneo.
Otro de los objetivos de estas iniciativas es fomentar el desarrollo del fútbol femenino profesional, que suele tener menos oportunidades que el masculino.
“Faltan clubes que ofrezcan entrenamientos para niñas o tengan equipos femeninos. Descubrimos que Cuju puede ayudarlas a mejorar porque, simplemente, les damos acceso (al entrenamiento)”, agrega Muller.
Por su parte, Footbao quiere aumentar la proporción de mujeres en su plataforma del 20% actual a un 50% para el año 2027, cuando Brasil será sede del Mundial Femenino.
Limitaciones
A pesar del entusiasmo que genera el potencial de la IA para transformar distintos sectores de la economía, expertos advierten sobre sus limitaciones actuales en el scouting futbolístico.
Russell Gurr, de International Football Consultancy, una firma escocesa especializada en scouting internacional, destaca que una de sus ventajas es dar mayor visibilidad a los jugadores juveniles.
“Hoy la IA funciona muy bien como un primer filtro para reducir la cantidad de candidatos”, dice. “Después de eso, en el siguiente nivel, se necesita intervención humana”.
El jefe del Lecce, Mencucci, sostiene que si bien la IA tiene potencial para el scouting, por ahora hay factores que no puede considerar, como ocurre con los fichajes extranjeros. “Cuando eliges a un jugador, necesitas saber si puede adaptarse a Italia. Eso es importante, e impredecible”.
Estas tecnologías también podrían reforzar una preocupación creciente en Brasil: la salida temprana de jóvenes promesas hacia países más ricos, lo que va en desmedro del fútbol local.
La verdadera prueba comercial para estas aplicaciones será si logran convertirse en herramientas estándar dentro del kit de scouting de los grandes clubes en los próximos años.