La inflación estadounidense parace estabilizarse. Es que el Indice de Precios al Consumidor de la mayor economía del mundo anotó una variación de 0,4% en abril, una décima menos que en marzo.
La cifra estuvo dentro de las proyecciones de los analistas.
La inflación subyacente subió un 0,2%, también en línea con lo esperado.
El IPC interanual refleja en mayor medida las presiones inflacionionarias que enfrenta la economía estadounidense. En los últimos doce meses la subida asciende a 3,2%, sus niveles más altos desde finales del año 2008.
Las remuneraciones horarias promedio de los trabajadores, ajustadas por inflación, bajaron un 0,3 % en abril y han disminuido un 1,2% en los últimos doce meses, según el informe del Gobierno.
Un ingrediente mayor de la inflación el mes pasado fue el incremento de los precios de los combustibles: el precio promedio de la gasolina subió de US$ 3,54 por galón en marzo a US$ 3,81 en abril.