Más de 8,4 millones de personas viven en la ciudad de Nueva York, una metrópoli llena de luces, tráfico, gente y comercio, que demanda cada día mayores requerimientos. Las respuestas están llegando de la mano de un concepto acuñado recientemente: Smart City o ciudad inteligente, que apunta a integrar en un sistema planificado todas las variables que se conjugan en una urbe y que pasan por materias como infraestructura, eficiencia energética, manejo del agua, comunicación, transporte, tecnologías, automatización y seguridad. En síntesis, una mejor calidad de vida.
Es un tema no menor para esta megaciudad, que ya vivió en carne propia el atentado terrorista que destruyó las torres gemelas el 11 de septiembre de 2001; con niveles de delincuencia hoy en retroceso y que, recientemente, en sufrió los efectos en buena parte de su territorio del poderoso huracán Sandy.
Un sistema inteligente y, por sobre todo, integrado, ayuda por ejemplo a que las ciudades no colapsen por una catástrofe, cortes de suministros o frente al aumento de la población (se estima que esta ciudad crecerá en un millón de habitantes).
La alcaldía liderada por Michael Bloomberg inició una cruzada para hacer de la ciudad una urbe sustentable, inteligente y sostenible. Los niveles de delincuencia, por ejemplo, descendieron en los últimos diez años en un 34%, situándola como la ciudad grande más segura de ese país por sobre Chicago, Washington o Boston, de acuerdo a información oficial del gobierno de EEUU.
Otro aspecto importante, es avanzar en sustentabilidad. En 2006 la alcaldía creó la Oficina de Planificación y Desarrollo Sostenible a largo plazo y, en 2012, el alcalde Bloomberg lanzó el Plan Integral de Sustentabilidad (PLANYC), con siete ejes de acción y 127 propuestas para hacer a Nueva York más sustentable, incluyendo la reducción de 30% en las emisiones de carbono ( aquí los grandes edificios son los responsables del 75% de la emisión de CO2).
Lo interesante es que el gobierno local no está sólo en esta cruzada. Hay varias empresas comprometidas con contribuir a través de innovación, tecnología e investigación, a poner a esta megaurbe en la senda “green”, moderna y sustentable. Tal es el caso de la multinacional alemana Siemens, que está trabajando en varios frentes: en la incorporación de automatización en un porcentaje importante de la red de metro; la inclusión de tecnología y eficiencia energética en la nuevas construcción de la zona cero e introducción de tecnología en edificios patrimoniales, son parte de esta NYC que busca posicionarse como una de las urbes más verdes y modernas del mundo.