España ata vínculos económicos con Cuba
Un centenar de compañías españolas mantuvieron un encuentro con empresarios cubanos.
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En el tiempo de descuento del gobierno de Mariano Rajoy en España, la acción diplomática apura sus últimos días para dejar bien atadas las relaciones con los países más prometedores para la inversión. Irán, Argentina, Kazajstán... Naciones que o bien viven giros políticos decisivos, o están en plena apertura al exterior y tienen importantes activos económicos. Cuba es un objetivo crucial desde que comenzara el deshielo de las relaciones con Estados Unidos y, por ende, con el resto del mundo. La visita de la semana pasada a la isla caribeña de los ministros de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, y de Fomento, Ana Pastor, que se completó el jueves y viernes con un gran encuentro empresarial, simboliza esta nueva etapa.
“Creo que hemos alcanzado el punto más álgido en las relaciones entre España y Cuba en estos años”, dijo García-Margallo, para quien existe “un antes y un después” en la cooperación gubernamental y empresarial. Tanto es así que los ministros se reunieron por dos horas con el presidente cubano, Raúl Castro. “Que nos reciba un Jefe de Estado no es lo que el protocolo exige, es más bien muestra de un gesto especial hacia España por parte de las autoridades cubanas”, destacó Margallo.
La relación goza de un momento dulce sobre todo después de que España, en el marco del Grupo de Acreedores de Cuba (GAC), perdonara 1.492 millones de euros en intereses de demora, casi la mitad de todo lo que se debe.
Margallo y Pastor también tuvieron reuniones de trabajo con varios ministros del país, entre ellos el canciller Bruno Rodríguez, el vicepresidente Ricardo Cabrisas y los titulares de Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca; Construcción, René Mesa; y Transporte, Adel Yzquierdo.
El lunes, Pastor e Izquierdo firmaron un acuerdo para cooperar en diversas infraestructuras: transporte por carretera, diseño de normas sobre transporte marítimo, gestión de servicios ferroviarios, mantenimiento de trenes y gestión de aeropuertos.
España es el primer socio comercial europeo de la isla y el tercero del mundo, por detrás de Venezuela y China. En lo que va de año, las exportaciones de mercancías a la isla en los dos primeros meses del año han crecido un 20% en comparación con el mismo período del año pasado y el capital español tiene una presencia dominante en el turismo: las empresas españolas gestionan más del 90% de las habitaciones de los hoteles de cinco estrellas y el 60% de los de cuatro. También se buscan oportunidades en ámbitos que el gobierno cubano quiere abrir a la inversión extranjera, como la agricultura, la energía (sobre todo las renovables), la distribución comercial y la construcción. Con este motivo, la semana pasada tuvieron lugar sendas jornadas organizadas por las cámaras de comercio de ambos países en las que participaron un centenar de compañías, entre ellas Acciona, Gas Natural y Gamesa. Estuvieron presentes, entre otros, el secretario de Estado de Comercio en funciones, Jaime García-Legaz, y el vicepresidente de CEOE, Joaquín Gay de Montellà.
Uno de los proyectos más apetitosos del país es la zona portuaria de Mariel, situada a unos 45 kilómetros de la capital, que disfruta de un régimen fiscal especial para hacer inversiones. Algunas compañías españolas de distribución alimentaria ya se han instalado allí. Pero de momento la principal obra del puerto corre a cargo de la constructora brasileña Odebrecht.
Mayor competencia
Pero la competencia es dura: desde que Washington y La Habana recompusieran sus relaciones, las principales potencias del mundo han visitado la isla para posicionarse de cara a los jugosos contratos que asoman en el horizonte.
Empresarios y dirigentes públicos de EEUU, Francia, Brasil, Reino Unido, China y otros países se han reunido con las autoridades cubanas en el último año y medio. Los franceses tienen una posición predominante en el sector constructor, y las empresas estadounidenses podrían ser rivales de las españolas en el turístico. El 1 de mayo llegó a La Habana el primer crucero procedente de Miami en cincuenta años. Y el Fondo Monetario Internacional estima que el levantamiento del embargo de viajes podría triplicar el número de turistas estadounidenses en la isla hasta alcanzar los 300.000 al año.
No es la primera vez que un ministro español visita la isla: ya lo hicieron en noviembre el ex ministro de Industria, José Manuel Soria, y el de Economía, Luis de Guindos. Pero ninguno se había reunido con Castro. También la semana pasada visitó la isla el presidente de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, y a fines de mes lo hará el de Galicia, Alberto Núñez Feijóo.