Una jornada para olvidar tuvieron los mercados
estadounidenses. Y, curiosamente, el ultra negativo desempeño de las acciones
volvió a repetirse un día lunes. El temor de los inversionistas a que la crisis
financiera lleve al mundo a una recesión pese a los intentos de gobiernos y bancos
centrales para frenar esa situación, arrastró a los mercados a su nivel más
bajo en cinco años.
Preliminarmente, el indicador de industriales Dow Jones cerró
con un retroceso de 3,58% que lo arrastró hasta los 9.955 puntos. Este es su
nivel más bajo desde el 26 de octubre de 2004.
Mientras, el extensivo S&P 500 sufrió una pérdida de 3,86%
que lo ubicó en las 1.056,84 unidades, un nivel no visto desde diciembfre de 2003.
El índice tecnológico Nasdaq fue le más afectado al desplomarse
4,32% a 1.862 puntos.
La fuertes baja de las bolsas estadounidenses se dieron en medio
de un clima de pánico total. Las bolsas europeas recibieron la apertura de Wall
Street con caídas superiores al 5% y el estreno negativo del principal mercado
del mundo terminó por hundir aún más los mercados del viejo continente. Sin ir
más lejos, el Cac de París cerró con un retroceso de 9,04%, el más importante
de su historia.
El negativo tranco de Wall Street y Europa tuvo efecto de bola de nieve sobre el resto de los mercados. En Latinoamérica, destacó especialmente la Bolsa de Sao Paulo que tuvo que suspender dos veces su operaciones cuando el indicador Bovespa cayó hasta 14%. Finalmente, y del mismo modo que en Nueva York, las bajas se fueron moderando hasta llegar a "solo" 5,43%.