Abril marcó un hito en el mercado de deuda corporativa local.
Y es que las emisiones de bonos de empresas superaron US$ 770 millones, anotando los montos más altos en dos años, luego de que en abril de 2012 se colocaran unos US$ 875 millones.
En el cuarto mes del año, seis empresas probaron suerte en el mercado de deuda: Embotelladora Andina, Tanner Servicios Financieros, los bancos Penta, BBVA e Itaú, y Celulosa Arauco.
Justamente la filial de Copec explicó parte importante de los montos, al emitir dos series por un total de
US$ 304 millones.
Según operadores de renta fija, los emisores han aprovechado que las tasas se ubican en mínimos históricos para refinanciar pasivos, en el marco de un sesgo más expansivo del Banco Central que ha llevado a recortes de 100 puntos base en la Tasa de Política Monetaria (TPM) desde octubre.
“La tasa está muy baja y es muy buen momento para refinanciar pasivos”, explica el jefe de la mesa de dinero de Econsult Asset Management Rodolfo Friz.
Por otra parte, el mercado estaría demandando de manera “muy agresiva” papeles de renta fija, ante el complejo escenario en el exterior y una mayor percepción de riesgo a partir de conflictos geopolíticos y la continuación del retiro de los estímulos monetarios de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed).
¿Efecto reforma?
Voces en el mercado han comenzado a levantar la idea de que el mayor dinamismo en el mercado de deuda en el último mes también estaría relacionado con la reforma tributaria. ¿De qué manera? Al eliminarse el Fondo de Utilidades Tributables (FUT), las compañías deberían volcarse al mercado de capitales a buscar financiamiento, por lo que varios agentes estarían adelantando emisiones frente a un posible encarecimiento en las condiciones de financiamiento una vez implementada la reforma.“Es claro que la reforma tributaria llevará a que las empresas necesiten más deuda. Y no es una mala alternativa preparar emisiones desde ya”, dice Friz.
Similar opinión tiene el gerente de la mesa de dinero de Fynsa Miguel Inzunza, aunque ve el efecto recién entre 2015 y 2017.
“Efectivamente la reforma va a afectar el endeudamiento si se aprueba tal cual está. Habrá un aumento en los pasivos y reducción de patrimonio. Eso sí, son pocos quienes se han adelantado a este tema porque es pronto aún. Pero hay gente haciéndolo”, señala.
En tanto, el head of debt capital markets de BBVA Alejandro Hasbún señala que el incremento del impuesto de timbres y estampillas (que pasará de 0,4% a 0,8%) podría alterar las decisiones de los agentes, ya que el tributo grava las colocaciones de deuda y los créditos corporativos.
“La única razón por la cual una compañía hoy podría adelantar una emisión antes de hacerla en 2016, es por el impuesto de timbre y estampillas, que es un costo que las compañías que quieren ir al mercado de capitales deberán asumir. Por el lado del FUT, es un tema que aún está en proceso de análisis entre los clientes”, advierte.