La preocupación ante una sobreoferta en el mercado global del petróleo nuevamente presionó los precios de crudo este jueves.
Y es que a una semana de que la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) decidiera mantener sin cambios su producción -pese a la baja en los precios-, su accionar sigue teniendo eco en el mercado.
Además, ayer se conoció que Arabia Saudita optó por reducir abruptamente sus precios del petróleo de enero para sus clientes de Asia y Estados Unidos, lo que fue interpretado por algunos analistas como una muestra que el país está intensificando su pelea por cuota de mercado tras negar su apoyo a que la OPEP baje la producción.
En este escenario, el petróleo brent anotó ayer una nueva caída que ubicó el precio del barril por debajo del nivel de los US$ 70 por primera vez desde mayo de 2010. Así, el crudo de referencia en europeo cerró en US$ 68,74 por barril tras ceder 2,34%.
El mismo comportamiento se observó en el West Texas Intermediate (WTI) -de referencia para el mercado local-, aunque la magnitud fue menor: perdió 0,85% tras terminar en valores de US$ 66,78.
Con todo, ambos referentes se mantienen en sus valores más bajos en más de cuatro años.
"El sentimiento es claramente más pesimista", expresó a Bloomberg Michael Lynch, presidente de Strategic Energy and Economic Research. "Vamos a ir inclinándonos a precios más bajos hasta que haya una seria mejora en la economía, una interrupción en el suministro o algún miembro de la OPEP decida realmente hace algo en vez de decir que alguien más debe tomar medidas", agregó.