La integración de los mercados bursátiles fue como un verdadero mantra que recorrió todo el mundo en 2011, aunque a la fecha los resultados son modestos.
Un ejemplo es el mercado MILA, que reúne a las bolsas de Colombia, Perú y Chile, y que partió a fines de mayo pero que registra muy bajos resultados en términos de operaciones. Y eso que esta iniciativa logró despegar, ya que la anunciada unión de las bolsas de Lima y Bogotá fracasó tras comentarios en contra del presidente peruano, Ollanta Humala. También cancelaron sus planes de fusión las bolsas de Toronto y Londres, esta vez por falta de respaldo de los accionistas canadienses.
A nivel global, los gigantes NYSE Euronext y Deustche Börse -que daría lugar a la mayor plaza financiera del mundo- pidieron retrasar al 31 de marzo la fecha límite para completar su fusión, a la espera del pronunciamiento de reguladores europeos luego que EEUU aceptara el negocio con condiciones.
Pero la marea continúa y así como se espera pronto conocer ofertas por la Bolsa de Metales de Londres, las plazas de Tokio y Osaka anunciaron su fusión para 2013 y las del BRIC lanzarán un mercado de derivados conjunto este año.