La licitación del stock de afiliados de AFP -a razón de 10% cada dos años- es una de las preocupaciones del mercado financiero en el marco de la implementación de la reforma de pensiones.
10% de la cartera de afiliados de AFP será licitada cada dos años.
Específicamente, la inquietud radica en el impacto que pueda tener la medida que está contenida en la Ley 21.735. Particularmente, lo que han advertido varios actores del mundo previsional y financiero es que exista un riesgo en el proceso de traspasos de activos, por ejemplo, en el caso de aquellos más difíciles de trasladar, como los activos alternativos.
Sin embargo, distintas fuentes cercanas al proceso de puesta en marcha aseguraron a DF que este es también uno de los temas que la Superintendencia de Pensiones busca resguardar, de manera que el diseño de la nueva subasta tenga el menor impacto posible sobre el mercado de capitales.
Y así se desprende de las últimas intervenciones del superintendente de pensiones, Osvaldo Macías.
En el seminario titulado “De multifondos a fondos generacionales, el desafío del nuevo régimen de inversiones”, organizado por la Asociación de AFP y transmitido este lunes por Emol TV, el regulador sorprendió con una idea que estaría testeando para hacerse cargo de estos riesgos.
“Estamos pensando en hacer una cámara de compensación”, planteó Macías. ¿Qué significa la idea propuesta por el regulador? “Por ejemplo, si un administrador tiene activos alternativos determinados, no tiene por qué transferir el 10% de ellos, ni venderlos, sino que se puede quedar con la propiedad del activo alternativo”, explicó.
En concreto, señaló que “el 10% de los flujos va a la empresa que se ganó la licitación de stock, y a su vez, los llamados ‘de capital’, la empresa que se ganó la licitación también se la manda a la AFP de origen”.
Para el superintendente, lo anterior implicaría que “no es necesario desprenderse del activo alternativo” y aseguró que “hay que buscar soluciones”.
¿Cómo funcionaría?
En palabras simples, una cámara de compensación que citó el regulador es un sistema que actúa como intermediario para facilitar y organizar intercambios entre distintas partes, sin que tengan que hacerlo directamente entre ellas.
Así, en vez de vender el 10% de estos activos alternativos, la AFP que es dueña de ese activo mantiene la propiedad del mismo, pero transfiere el 10% de los flujos futuros (ganancias o retornos) de ese activo a la administradora que se adjudicó la subasta.
A su vez, la AFP ganadora reconoce a la firma original ese valor como “capital”, es decir, como si lo hubiera invertido.
De esa forma, en lugar de que cada parte le pague directamente a otra, todas las transacciones pasan por la denominada “caja”, que se encarga de ajustar cuentas.
“La hemos testeado con algunas personas y les parece una buena idea”, dijo Macías sobre la idea que deslizó como opción para resguardar el efecto que pudiera tener el traspaso.
Asimismo, añadió que “podemos dejar un porcentaje pequeño de activos no transferibles. Por lo tanto, es perfectamente compatible una licitación de stock con fondos generacionales, carteras de referencias, las que serán pensadas en el largo plazo”.
La mirada del sector financiero
En el mismo conversatorio, la directora y country manager de BlackRock en Chile, Silvia Fernández, aseguró que “transferir un activo alternativo, a mi modo de ver, no es tan fácil”. A su juicio, “tenemos que considerar que hoy día hay fondos de pensiones que están en proyectos de coinversión. Ahí no hay un fondo, sino que es directamente el fondo de pensiones que está participando en la propiedad del proyecto”.
Para Fernández, “no es transferible. El fondo alternativo efectivamente no es solo el valor que tienes hoy, sino el llamado a capital a futuro”. Así, manifestó que “traspasar desde el punto de vista del gestor de ese fondo eso llamado capital a otro actor, no es tan fácil, porque este último pasa a ser sujeto de crédito”.
La presidenta de la Asociación de AFP, Paulina Yazigi, añadió que, no solamente está la parte operativa, legal y técnica de traspasar -que para algunos activos puede ser hacerlo a través del Depósito Central de Valores (DCV) y para otros va a ser casi imposible traspasarlo-, sino que “está el hecho de que cuando un equipo de inversiones hace una inversión, no es llegar y apretar un botón”.
La timonel del gremio que reúne a seis de las siete administradoras de la industria explicó que se hace todo un análisis sobre las inversiones, lo que toma tiempo. “Y cuando tú haces todo ese análisis para que cada dos años te vayan quitando de a 10% para que al cabo de ‘x años’ te quiten toda esa inversión, por supuesto que desanima a cualquier equipo de inversiones y también evita que el afiliado tenga la mejor pensión porque no va a poder tener la mejor cartera”, planteó.
Yazigi concluyó que “hay que analizar mucho eso”.
Fernández complementó a Yazigi y mencionó que por años, a las AFP se les ha pedido que tengan una política de inversión responsable y que la definan. “Es importante, cuando consideramos la licitación, que se entienda que las AFP tienen que ser responsable de sus políticas y que tienen el derecho a poder decir esto recibo y esto no lo recibo”.