
Un beso, el arma secreta de Juncker para desarmar a Trump
En su encuentro con el mandatario de EEUU, el presidente de la Comisión Europea apeló a su encanto personal. “Querido Donald, tenemos historia en común”, le dijo. Pero tampoco escatimó en determinación. “Si usted quiere ser tonto, yo también puedo serlo”, advirtió.