“Un 80% de la población en Chile sufre de trastornos del sueño, pero un 95% de ellos no accede a tratamientos por falta de recursos o tiempo”. Con este diagnóstico el kinesiólogo, José Ignacio Marmolejo, se propuso abordar el problema y desarrolló una solución que integra evaluaciones clínicas, sensorización en el domicilio del paciente, una plataforma con inteligencia artificial (IA) y validación médica.
En 2023 fundó Health Intelligence Solutions (HIS) y levantó $ 100 millones con un inversionista ángel, y este año fue una de las ganadoras del Santander X Global Challenge Reimagine Silver Age, reconocimiento que, según Marmolejo (CEO), impulsó su visibilidad internacional. La firma ya comenzó a atender a sus primeros pacientes en Guatemala, está en marcha blanca en Colombia y proyecta llegar a Ecuador y España durante 2026.
Marmolejo contó que padece de apnea del sueño, de ahí su sensibilidad con el tema. La startup se especializa en la identificación de este trastorno en particular, pero también proporciona sospechas diagnósticas de otros, como la narcolepsia o el trastorno de conducta del sueño REM.
Comentó que el proceso comienza con una evaluación clínica a través de un cuestionario vía WhatsApp y el envío de un sensor al domicilio del paciente, que mide variables respiratorias y de sueño durante la noche.
Luego, la información se procesa en una plataforma desarrollada por HIS que combina análisis automatizado con IA y validación realizada por médicos. Posteriormente, el paciente recibe un informe con diagnóstico y una derivación a especialistas según corresponda.
“El médico revisa los exámenes y valida la plataforma, y dice: ‘Tiene una apnea severa con obstrucción nasal’, y con la IA personalizamos la recomendación. Le decimos al paciente cuál es el médico que tiene más posibilidades de resolver su problema. Esto evita que realice un periplo de meses y múltiples consultas y exámenes que no siempre resultan”, afirmó Marmolejo.
Expansión internacional
Marmolejo comentó que HIS ya concretó sus primeros clientes en Guatemala, y está “en marcha blanca” en Colombia, y el próximo año llegarán a Ecuador, con una empresa vinculada a la salud ocupacional.
Además están en conversaciones con hospitales en España para realizar pilotos y validar la tecnología.
Respecto del modelo de negocio, señaló que combina el pago por prestación a pacientes directos y centros de salud asociados en distintas regiones del país -como centros bariátricos, odontológicos y nutricionales- que “tienen que evaluar el sueño, pero no quieren mandar a sus pacientes a hospitalizarse a algún lugar”.
También cuentan con servicios a empresas, por ejemplo, para operadores de maquinaria de BHP, donde la detección temprana de trastornos del sueño es un requisito de seguridad.
“En estos dos años hemos evaluado 4.500 pacientes, y una clínica tradicional evalúa, en promedio, 1.400 pacientes al año”, afirmó Marmolejo.