El ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, celebró la entrada
en vigencia de la reforma provisional, iniciativa que tendrá un costo de US$
3.000 millones anuales.
"Este nuevo sistema termina con la pobreza de la
tercera edad y en segundo lugar garantiza pensiones a todos los chilenos; se
nace con pensión ahora en Chile", señaló Andrade a Radio Cooperativa, afirmando
que este es un paso trascendental para salir de los rankings de inequidad.
El ministro Andrade rechazó las críticas hacia la ayuda
estatal a los pensionados, afirmando que ellas provienen de círculos que creen
que el mercado debe resolver estas cosas, reafirmando que "la intervención
del Estado en estas materias sigue siendo fundamental".
"El Estado hace dos tipos de cosas: se hace cargo de
los más pobres -que es parte de su tarea- y también se hace cargo de las
grandes líneas de la economía, y en ese sentido nuestra impresión es que
estamos haciendo lo que nos corresponde", explicó a ese medio radial.
El ministro Andrade cifró el costo de la reforma previsional
en el orden de los tres mil millones de dólares anuales a 2012. "Esto como
es gradual, tiene gastos en el intertanto un poco menores, pero cuando estemos
con el millón 300 mil beneficiados, estamos hablando del orden de unos US$ 3.000
millones anuales", señaló.