Según el presidente de la Confederación del Comercio
Detallista y Turismo (Confedech), Rafael Cumsille, luego de receso en el sector
comercial, por la implementación de feriados irrenunciables, los únicos
trabajadores de este sector que sacan cuentas alegres son los propietarios de
un negocio familiar, ya que vieron incrementadas sus ventas en un 30%, por lo
menos. Sin embargo, para los microempresarios, no fue una buena fecha, ya que
vieron afectadas sus ganancias.
Cumsille aseveró que "estos días feriados arrojaron
resultados positivos para las personas que trabajan con su grupo familiar, ya
que aumentaron sus ventas alrededor de un 30% y las botillerías un porcentaje
mayor".
Con respecto a lo anterior, manifestó que sólo el 10% de los
comerciantes pertenece a este grupo de negocios que son atendidos por sus
dueños, convirtiéndolos en minoría.
El líder del gremio destacó que "lo que hay que
considerar, es que muchos microempresarios, que tienen contratados de 1 a 9
trabajadores y que no pudieron operar con la familia y pararon las ventas, no
tuvieron los mismos beneficios".
Tomando en cuenta este antecedente, sentenció que "no
todo el comercio detallista se benefició".
"Lo peor de todo estuvo en las zonas turísticas, ya que
al ser muchos días feriados, en donde la población flotante aumentó, ellos
perdieron la oportunidad de incrementar las ventas", concluyó.