Macro

Grau desde México: "Buscamos ser un gobierno de cambios, pero no un gobierno de sorpresas. Es posible tener cambios con certidumbre"

Samsung, Blackrock, ALLVP y Grupo México estaban en la agenda de reuniones que tuvo este jueves el ministro de economía en México. Con ellos, habló de la situación en Chile y las posibilidades de atraer inversión.

Por: Nicolás Durante, desde Ciudad de México. | Publicado: Jueves 24 de noviembre de 2022 a las 15:49 hrs.
  • T+
  • T-
Foto: Julio Castro
Foto: Julio Castro

Compartir

Un fajo de tarjetas de presentación de empresarios mexicanos le dejaron al ministro de Economía, Nicolás Grau, y su equipo en el desayuno que lideró el Presidente Gabriel Boric el miércoles, en el primer día de la gira a México.

Todos querían juntarse con las autoridades para conversar de Chile. Por eso, este jueves el secretario de Estado antes de viajar de regreso al país tenía reuniones una tras otra. En la agenda estaban empresas de turismo mexicano, ejecutivos de Blackrock, un almuerzo con el fondo de inversión de capital de riesgo ALLVP -donde es socia la chilena Antonia Rojas-, y reuniones bilaterales con Samsung, así como con el poderoso Grupo México, que tiene inversiones mineras en México y Perú, e infraestructura y transporte. También se reuniría con la empresa de data centers Yondr.

“Dado el contexto que enfrentamos, estamos terminando el año mejor de lo que se esperaba. Pero hay que ser cautos porque 2023 va a seguir siendo un año difícil”.

- ¿Cómo fue la recepción de los empresarios? ¿Cuál es el balance del desayuno que tuvieron con ellos?

- Había más de 150 empresarios y empresarias. El grueso eran mexicanos, pero también había chilenos, sobre todo una comunidad de start-ups presentes acá, además de la comitiva chilena. La reunión fue muy buena. Hemos hecho algo similar en Estados Unidos y en Canadá, que es tener conversaciones con empresarios, más que solo hacer presentaciones, donde los empresarios pueden hacer sus preguntas, escuchar con más calma los desafíos de corto, mediano y largo plazo que tiene el país. Quieren entender cuál es nuestra estrategia en términos económicos y en general los balances son positivos.

- ¿Hay inquietud de las empresas por invertir en Chile?

- No solo acá, sino en cualquier otro lugar que hemos visitado, y también cuando nos juntamos en Chile con empresas de capital internacional, suelen tener una mirada un poco más de mediano o largo plazo y tienen una mirada bastante optimista de Chile. Ponen en contexto las cosas que sucede en Chile con respecto a lo que sucede en otros lugares.

- ¿Son menos alarmistas?

- Claro, tienen una mirada más ponderada porque tienen tienen de dónde compararnos. En general, Chile es un lugar muy favorable cuando uno lo compara con otros lugares, pero eso no significa que sean conversaciones solo de buena crianza. Ellos hacen preguntas, tratan de entender qué está sucediendo en Chile y qué haría más probable que ellos pudieran invertir más. Son conversaciones muy útiles para nosotros.

- Y cuando le preguntan sobre nueva Constitución, seguridad pública, desaceleración de la economía, ¿cuál es el mensaje para los empresarios extranjeros?

- El tema constitucional hasta ahora por lo menos no ha aparecido como tema. Y del tema de seguridad, como ellos están en México, México no es un país con mejores estándares de seguridad que Chile. De hecho estamos muy, muy lejos. Yo diría que sí se ha preguntado más de los temas de corto plazo, cómo el gobierno lo está abordando. Entonces allí describimos las distintas reformas que estamos realizando. Les contamos cuál es nuestro plan que hemos implementado para ir abordando en conjunto con el Banco Central el tema de la inflación. La importancia de mantener los empleos y las distintas medidas que está tomando el Gobierno para acelerar la inversión. Los inversionistas, cuando están pensando una inversión, piensan en 10 o 20 años, por lo tanto el ciclo del próximo año les importa menos.

Ahora estamos en un buen momento en Chile comparado con la visión que podríamos haber tenido en reuniones hace cinco meses. Hay una visión de que la inflación va por buen camino, es decir, una inflación alta pero que está siendo controlada y hay un horizonte en que esto se va a solucionar y hay una trayectoria hacia la baja que está en las proyecciones del Banco Central.

- Pero el 2023, según todos los análisis, sigue viéndose como un año muy complejo.

- Sí, vamos a seguir teniendo inflaciones más altas que el 3%, pero vamos a ir convergiendo a final de año a valores en torno a eso. Pero este ha sido un buen año de inversión en Chile, a pesar de que teníamos y seguimos teniendo mucha preocupación por cómo puede evolucionar la inversión en un contexto externo complejo. Tanto la inversión extranjera directa, como la formación bruta de capital, muestran que ha sido un año de crecimiento de inversión respecto al 2021. Durante este año lo que ha bajado más fuerte es el consumo, pero eso es justamente lo que necesitamos para controlar la inflación. Y en el empleo, después de que los primeros meses creciendo el desempleo, ahora más bien se ha mantenido, pero no hemos tenido un impacto todavía negativo en empleo y la inversión la hemos tenido en números mejores que el que el año anterior, que fue un buen año. Dado el contexto que enfrentamos, diría que estamos terminando el año mejor de lo que se esperaba. Pero hay que ser cautos porque el 2023 va a seguir siendo un año difícil.

- ¿El Gobierno tiene planeado algún programa en particular para seguir frenando la inflación?

- El aporte principal que tiene que hacer un gobierno para contener la inflación es tener una política fiscal responsable. Ese es su aporte principal y eso se está haciendo, ha sido un año excepcional en eso. Haber pasado de en torno a ocho puntos del PIB de déficit fiscal que tuvimos el 2021, a prácticamente superávit fiscal durante este año, en el contexto de un Gobierno que está asumiendo, que además tiene una serie de demandas sociales, diría que es una prueba muy fuerte del gobierno respecto a su compromiso de tener una macro ordenada. Ese es nuestro aporte principal.

Y después, por cierto, otro rol muy relevante del Gobierno es que en la medida que se mantenga la inflación, y que las familias sigan teniendo problemas importantes como los que han tenido este año, apoyar a las familias a través de distintas medidas.

- Entonces la baja popularidad del Gobierno y del presidente no los va a hacer entregar bonos a todo el mundo o apoyar un sexto retiro desde las AFP?

- Las políticas públicas que vamos pensando siempre, no solo en el tema económico, tienen que ver con cómo pensamos que debemos aportar de mejor manera a las demandas de la ciudadanía. Esto no lo hacemos basado en encuestas, sino que en qué pensamos nosotros. Hemos presentado ya las reformas estructurales que son, a nuestro juicio, una forma de abordar estos distintos desafíos de forma sostenible y permanente en el tiempo. El ejemplo más claro de esto es la combinación entre la reforma tributaria y la reforma de pensiones. A nosotros nos encantaría haber entrado al Gobierno y haber subido la pensión a $ 250.000, pero eso no hubiese sido responsable. Lo responsable como gobierno es que estas demandas de la ciudadanía, que son urgentes, se puedan resolver de forma estructural lo más rápido posible. Y eso es lo que hemos hecho presentando dos reformas muy contundentes y complejas de manera bastante rápida durante el primer año.

- En consideración de cómo se ha comportado la oposición, ¿cuánto van a tener que morigerar sus reformas estructurales para poder aprobarlas?

- El presidente Boric siempre nos ha dicho y nos ha pedido que busquemos los más amplios consensos en torno a estas reformas. Cuando uno lee, por ejemplo, el informe de la OCDE respecto a la necesidad de una reforma tributaria, la evaluación que es positiva, pero también cuando uno ve las dificultades que ha tenido nuestro sistema de pensiones durante los últimos diez años por haber postergado tanto tiempo una reforma que todos entienden que tiene que ocurrir, creo que es un contexto bastante claro que nos debiera hacer a todos y todas entender, más allá de nuestras posturas políticas, la necesidad de estas dos reformas estructurales.

Por supuesto que el Gobierno tiene una responsabilidad en generar esos consensos, en conversar, en persuadir y también verse persuadido.

- Se ha dicho que dueños de AFP extranjeras podrían demandar al Estado, ¿eso lo ven como una amenaza al Gobierno o una legítima preocupación?

En esto el ministro Marcel ha sido muy, muy claro que el gobierno está definiendo ciertos marcos regulatorios o ciertas formas en las que se organiza un sistema de pensiones, en el que los privados tienen un rol relevante y lo van a seguir teniendo. Eso no coarta nada, ni el derecho de propiedad ni ninguna de las seguridades importantes que deben tener las empresas en un contexto de economías de mercado.

No puede ser, en el fondo, que no se pueda discutir la política pública y el diseño de un sistema de pensiones, producto de que esto podría afectar a un incumbente en la forma en la que se desarrolló su negocio. Esto es algo que se hace en todo el mundo en las pensiones o en la minería, por ejemplo, siempre están cambiando las reglas.

Las democracias, los países, tienen la posibilidad de hacer cambios de políticas públicas. Lo importante para el sector privado, a mi juicio, y esto es una medida general que hemos tenido como gobierno, es que sepa de antemano cuál va a ser la dirección de estos cambios, de manera de evitar sorpresas. Lo que nosotros buscamos como gobierno es ser un gobierno de cambios, de cambios importantes en algunas dimensiones, pero no un gobierno de sorpresas. Es posible tener cambios con certidumbre.

El foco de la Agenda de Productividad

- La Agenda de Productividad en que trabaja su ministerio, ¿cuánto va a limitar la caída del PIB del otro año?

La discusión de productividad es una discusión que no tiene que ver con el ciclo económico, sino que es una discusión más estructural. Chile tiene un estancamiento de la productividad hace 15 años y la pregunta del millón es si vamos a tener los próximos diez o 15 años también ese estancamiento de productividad.

Ahora, con mucha más razón, se vuelve un elemento clave para ver si vamos a crecer con más fuerza los próximos 10 o 15 años. Entonces, la agenda del gobierno respecto a la productividad no tiene que ver con el próximo año. Las medidas que el Gobierno está haciendo para que el próximo año sea mejor de lo proyectado, tiene que ver con el plan de inversión, el Plan Invirtamos en Chile como también la inversión pública, que se está aumentando de forma muy sostenible, un conjunto de subsidios, con el apoyo a las empresas de menor tamaño. Pero la productividad tiene esa mirada de más largo plazo.

Esta es una agenda que trabajamos en conjunto con el Ministerio de Hacienda. Tiene ocho áreas y probablemente se agregue una o dos cada una. Se la propusimos a la CPC, al Consejo Consultivo de Empresas de Menor Tamaño, ellos reaccionaron a estas propuestas, nos hicieron un conjunto de sugerencias y además armamos mesas de trabajo de corta duración. Todo ese proceso debiera terminar durante diciembre y lo más probable es que en enero presentemos esa agenda habiendo recogido todos esos puntos de vista.

¿Estado como socio de emprendimientos?

- En el desayuno de ayer, hablaban de formas para mejorar el financiamiento de las start-ups, ¿qué están haciendo en concreto? 

Esa es una agenda que lidera la subsecretaria Petersen, que tiene que ver con todos los elementos asociados a que el sistema financiero chileno sea favorable a una estrategia de desarrollo que nos permita avanzar. Ella tiene un grupo de trabajo donde participa el Ministerio de Hacienda, la CMF, algunas personas del Banco Central, del mundo privado, BancoEstado y ellos están trabajando distintas agendas.

Una agenda importante tiene que ver con la Banca de Desarrollo, que probablemente va a ser una banca de desarrollo verde y va a estar enfocada a grandes proyectos estratégicos para abordar la descarbonización y la transición de nuestra matriz energética.

Y por otro lado, dar una mayor fuerza al desarrollo de las start-ups. La start-ups en Chile, con políticas que llevan más de una década, se han desarrollado de forma bien excepcional, pero hay bastante consenso en que se necesita dar un nuevo salto y que ese nuevo salto pasa, entre otras cosas porque exista realmente una mayor profundidad financiera y un mercado de capital de riesgo en Chile, de manera tal que cuando esas empresas quieren dar el salto no tengan que ir a buscar necesariamente afuera capital. Y eso es lo que está relacionado con la ley de Fondo de Fondos, que fue una ley que el gobierno anterior presentó en sus últimos días y que por eso no se tramitó, pero que nosotros hemos visto como algo positivo poder continuar con esa tramitación. Y probablemente es algo que vamos a desarrollar con fuerza y vamos a tramitar durante el 2023.

- ¿Pero no va a haber un cambio de modelo, donde el Estado no solo dé fondos o garantías estatales, sino que invierta y sea accionista? 

- Lo del fondo de fondos justamente lo que busca es generar un mercado, un sistema de capital de riesgo en Chile. Lo que uno requiere es tener un sistema financiero que se pueda hacer cargo de la combinación de riesgo y retorno. El sistema bancario tradicional no se puede hacer cargo de eso y el capital de riesgo normalmente se hace cargo, y para eso necesitas una estructura financiera que pueda compartir riesgos de forma adecuada. Y necesita una profundidad financiera que te permita hacer eso. Eso es lo que inspira la ley de fondo de fondos.

- Pero el Estado o alguna agencia del Estado como accionistas no está en sus planes.

- Un rol primordial del Estado en eso no está planteado. Pero sí el Estado tiene roles muy importante, entre otras cosas a través de Corfo movilizar ciertos recursos que permitan que exista este fondo de fondos. Corfo va a tene un rol en eso.

- ¿La Corfo tiene planificado renegociar el contrato con SQM en el Salar de Atacama?

- No es un tema que se haya resuelto y que pueda informar algo al respecto.

Lo más leído