Un llamado a no “sobrerreaccionar” ante la caída de 0,4% del Imacec en octubre -la primera en siete años- hizo ayer el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés. Tras participar en un seminario sobre productividad organizado por el Ministerio de Economía, la OCDE y el BID, la autoridad explicó que la paralización de algunas faenas mineras en el mes y los dos días adicionales menos respecto al mismo período de 2015, explicaron la baja en el crecimiento.
“Varios países están viendo un octubre malo. Nuestro Imacec fue negativo, eso hay que mirarlo con cautela, pero también responde a fenómenos de una sola vez”, dijo.
“Es una cifra menor a la que uno habría esperado, pero hay que mirarlo con cuidado. No hay que sobrerreaccionar a un mes específico”, planteó.
Junto con ratificar que el dato del décimo mes del año es “puntual”, la autoridad reiteró su tesis de que hay señales en la economía que hablan de un cierto repunte, como el desempeño de la bolsa y al alza en la inversión privada proyectada. Esto último, a pesar de la caída en los proyectos estatales previstos.
“Lo importante es no sobrerreaccionar. Tenemos un país sano que puede crecer más”, afirmó Valdés.
A la hora de explicar las razones de la caída en la actividad económica, sostuvo que “hay cosas bien específica, por ejemplo, una minera, la más grande, tuvo que cerrar cinco días por un accidente”, señaló.
Mejor ciclo de inversión
En tanto, el coordinador de macroeconomía del Ministerio de Hacienda, Claudio Soto, anticipó que el fin del ajuste en el ciclo de la minería está próximo, lo que justificaría una “marginal” recuperación de la inversión este año y el próximo.
El economista y alto asesor de Valdés respondió así a la caída en la inversión proyectada para el quinquenio 2016-2020 en el catastro de la Corporación de Bienes de Capital (CBC), que se redujo a US$ 60.000 millones, la cifra más baja de la serie histórica. Esta cifra incluye proyectos públicos y privados.
Para Soto, lo “relevante” para captar el sentimiento del sector empresarial es analizar la inversión esperada del sector privado, excluyendo las iniciativas estatales. Así, los proyectos realizados netamente por privados se incrementan en 10% en un año y 6% si se compara con el informe previo, ascendiendo levemente sobre los
US$ 43.000 millones.
“El cuadro cambia bastante si se incluye solo el sector privado. El catastro del sector privado muestra una tendencia al alza”, plantea.
Soto anticipa que el ciclo bajista de dicho sector estaría llegando a su fin.
“Los proyectos que han ingresado a evaluación ambiental han crecido fuertemente, la bolsa es un indicador que suma también. Nosotros esperamos que la inversión crezca marginalmente este año, pero sin duda el próximo año debiéramos ver cifras de crecimiento positivas”, plantea.
“Estamos entrando a la fase final de ajuste en el sector minero. Cuando hay un shock se da un período de sequía de proyectos, pero la minería seguirá invirtiendo. No se acabó la minería en Chile”, destaca el economista de la Universidad de Chile.