Luego de reunirse con el ministro secretario general de la presidencia,
Cristián Larroulet, el obispo de Concepción, Monseñor Ricardo Ezzati aceptó
mediar para propiciar una conversación entre el Gobierno y los 34 comuneros
mapuches en huelga de hambre.
Esperando que su rol tenga un resultado positivo para ambas partes, la
autoridad eclesiástica expresó que "sentarse a una mesa para dialogar es
una manifestación de la capacidad que tenemos los hombres de entendernos,
incluso frente a problemas y conflictos graves, la actitud de aceptar el
diálogo es muy loable y espero mi tarea que es la de facilitar este diálogo
pueda tener el éxito que todos esperamos".
La tarea que a mí me corresponde es simplemente
facilitar que esta mesa esté abierta, que las personas interesadas estén
invitadas, y le corresponde al Gobierno y a las comunidades mapuches poner
sobre la mesa los problemas que quieran dialogar, con la razón y el diálogo se
pueden superar los problemas", enfatizó Ezzati.
Por su parte, y agradeciendo al representante de la Iglesia,
Larroulet destacó "la voluntad" del obispo "para participar como
facilitador y mediador en conversaciones, de tal manera que nuestros hermanos
que están en una situación en huelga de hambre puedan deponerla".
El secretario de Estado destacó además "la disposición
del Gobierno para realizar aquellas reformas legales, jurídicas, aquellos
perfeccionamientos de la política indígena, de manera que logremos avanzar en
unidad entre todos los chilenos para el progreso del país y especialmente el de
los pueblos originarios".
No obstante, el representante del Ejecutivo explicó que
"los detalles de este proceso recién se están construyendo y muchas veces
para el éxito de estas cosas se requiere del día a día. Confiamos plenamente en
lo que Monseñor Ezzati va a hacer, y las conversaciones que va a tomar en los
próximos días. Vamos a ir informando oportunamente de ese proceso".
Esta mañana, en tanto, la Cámara de Diputados aprobó la creación de una comisión permanente de asuntos índigenas, iniciativa promovida por parlamentarios de la Alianza.