Absueltos
del delito de estafa resultaron la desaforada diputada Laura Soto y su ex jefe de
campaña, Cristián Garrido, en el juicio por el presunto desvío de
fondos públicos del Programa de Generación de Empleos (PGE) a su
campaña parlamentaria en 2005.
El
Tribunal Oral de Valparaíso determinó que "la prueba rendida mediante
el desarrollo del juicio no fue suficiente para establecer más allá de
toda duda razonable una participación culpable y penada por la ley" de
Soto y Garrido en los pagos irregulares de los activistas que
trabajaron en la campaña.
En tanto, el ex seremi del Trabajo, José Manuel Mancilla, fue condenado
como autor del delito continuado de fraude al fisco, mientras la
concejal Marisol Paniagua, hija de la diputada, y su ex yerno, Uziel
Valle, fueron declarados culpables del delito de estafa, cometido
durante el segundo semestre de 2005.
También
fueron condenados el ex jefe de gabinete de Laura Soto, Luis Gatica, y
los contratistas Sergio y Luis Vargas como cómplices del delito de
estafa continuado.