Empresas que promueven la partipación femenina obtienen mejores resultados

Alejandra Clavería



Aquellas organizaciones que diversifican liderazgos, promueven el equilibrio entre hombres y mujeres y adoptan estrategias comerciales dirigidas al género femenino, obtienen mejores resultados corporativos. Esta fue la principal conclusión del seminario “Mujer y negocios: talento, liderazgo y mercado”, organizado por ComunidadMujer y que convocó a autoridades ministeriales, expertos en igualdad de género y destacados empresarios, quienes debatieron cómo el rol de la mujer consumidora, profesional y líder de equipos de trabajo, ha incidido en el éxito de sus compañías. 
Al encuentro asistieron los ministros de Economía, Juan Andrés Fontaine, y del Sernam, Carolina Schmidt; los empresarios Marcelo Awad de Antofagasta Minerals, Enrique Cueto de Lan, Pablo Alcalde de La Polar y Mauricio Larraín de Banco Santander; y la líder en consultoría en Asia y Europa, Avivah Wittenberg-Cox, entre otros.

Dado que estudios recientes revelan que las empresas que integran mujeres en cargos gerenciales tienen un 35% más de rentabilidad que las que no lo hacen, Wittenberg-Cox hizo hincapié en la necesidad de incorporar al género femenino en puestos de responsabilidad, tanto para mejorar la productividad de la compañía como para aportar al desarrollo del país. 
"Hombres y mujeres tienen las mismas capacidades, por lo que tener miradas complementarias en directorios y cargos de decisión asegura no perder de vista las perspectivas de gestión de talento, desarrollo corporativo y oportunidades de negocios", explicó.

En ese sentido, Wittenberg-Cox llamó a las empresas a cultivar una idea de liderazgo bilingüe y a comprender que las mujeres no buscan ser iguales a los hombres, sino que aspiran a tener las mismas oportunidades y desafíos, pero con otros tiempos y exigencias. 
"Lo que deben hacer los gerentes es entender que existen diferencias entre ambos géneros y que esas diferencias entregan valor a la empresa, por eso es importante complementarlas y equilibrarlas", dijo.

Algo con lo que coincidió la ministra del Sernam, quien además instó a las corporaciones a promover políticas que fomenten la participación femenina. 
"Si las empresas quieren ser más rentables tendrán que cambiar las reglas del juego y si quieren retener a los mejores deberán entender qué es lo que quieren las mujeres para desarrollarse", aseguró.



Trabajo y familia 


Pese a que las cifras han mostrado una tendencia al alza en los últimos años, la desigualdad entre hombres y mujeres aún persiste en Chile. De hecho, el Índice de Disparidad de Género 2010 del Foro Económico Mundial, sitúa al país en el puesto 48 entre 134 naciones. Datos de ComunidadMujer, en tanto, revelan que las chilenas ganan actualmente un 37% menos que los hombres en los mismos cargos, mientras que su participación en los directorios de empresas es menor al 3%. 
Para Wittenberg-Cox esto se debe, en muchos casos, a la creencia de que el trabajo y la crianza de los hijos no es compatible. Sin embargo, estudios comprueban que la tasa de empleo femenino, así como los índices de natalidad, tienden a ser mayores en países en los que es más fácil para ellas trabajar.

"Si se fuerza a las mujeres a elegir entre trabajo y familia es muy probable que elijan lo primero, lo que traerá enormes consecuencias a la economía y demografía", afirmó.

Por ello, emplazó a las empresas a otorgar mayor flexibilidad al ciclo de carrera femenino, a fin de que ellas puedan combinar ambas tareas y no dejen de aportar sus talentos a la compañía.