"No dormirse en los laureles, no dejar de desafiarse, estar atentos al momento de los cambios y rediseñar algunas prácticas del Estado y de control", fueron algunas de las lecciones que planteó el ex contralor Ramiro Mendoza para enfrentar la desconfianza que afecta al país.
El abogado y actual decano de la Facultad de Derecho de la AUI, abrió o el segundo panel de la Enade 2015 dedicado a abordar ideas de "cómo hacer sociedad", ocasión en la cual sostuvo que "es urgente una nueva agenda de modernizacion del Estado" y "terminar con la complejidad legal", que a su juicio "nos va asfixiar".
Minutos antes Mendoza había sostenido que en Chile no sólo existe una "percepción de que la corrupción está en la institucionalidad del poder y ese es el poder económico, el político", sino que el nuestro es "uno de los países con menor confianza social en el mundo", lo que significa que "no confiamos entre nosotros y cuando no hay confianza no hay cooperación, se pierden las reglas de asociatividad, se pierde el capital social y no hay cohesión social".
De igual forma, acusó que "las respuestas han sido súper reaccionarias y todas tienden a complejizar el Estado", pues "usamos instrumentos que no corresponden para hacer gestión de políticas públicas porque estamos haciendo reacción".
Sobre este último punto, Mendoza planteó que el principal instrumento es la ley de Presupuesto, que "todos los años es más gordita" y donde se han hecho famosas las "glosas" que a su juicio son "la contradicción de la ley" al establecer la forma de cómo y a quién se le entrega plata.
"La glosa es la excepción de todo. Me saltó todo con la glosa, escondo lo que yo quiero, hago como yo quiero, gasto en lo que quiero y cuando quiero. Eso se llama volutarismo y no es propio de un regimen estatal , republicano y serio ", apuntó, cuestionando la gran cantidad de leyes existentes en el país.
A modo de respuesta a la pregunta de cómo salimos de esta situación que vive el país, Mendoza sugirió "la gobernanza del Estado y del sector privado, orientada en los pilares de la transparencia, rendiciones de cuentas decentes, participación y reglas de mejor calidad".
Recordando una frase del fallecido Felipe Cubillos, que señalaba que "la peor corrupción es la ineficiencia del Estado", Mendoza llamó a la audiencia de la Enade "a preocuparnos para que las curvas de deterioro no se sigan pronunciando y podamos tener un mejor Chile en unos años más".
Nás tarde, y en un punto de prensa, profundizó en su reflexión destacando que Chile es "un país distinto, hemos crecido mucho, tenemos una administración muy compleja desde el punto de vista de su gestión. No hay que dormirse en los laureles, hay que mirar, sin autocomplacencia, todo lo bueno que se ha hecho pero también darse cuenta que hay que construir un futuro diferente".
Agregó que la construcción de ese futuro "pasa esencialmente por un trabajo distinto desde el punto de vista de la gestión de la administración del Estado.