Desde el mundo privado ha sido uno de los principales promotores del cambio al actual sistema de salud, razón que incluso lo llevó a tomar la determinación de retirarse de la Asociación de Isapres. No obstante, el presidente de Colmena y miembro de la comisión que discute los cambios al sistema de Salud, Gonzalo de la Carrera, criticó en duros términos las conclusiones de la instancia -de la cual reclama no haber sido escuchado- que propone la creación de un fondo único de salud.
- ¿Cómo fue la discusión y cómo se llegó a este punto?
-Si uno mira cómo es la composición de la comisión, uno se da cuenta que el resultado era predecible. Es una composición de 18 personas donde solamente 4 pertenecen al sector y tienen interés en defenderlo y las otras 14 están por una reforma total al sistema de salud en Chile y a la estatización de la misma. No había como dar vuelta esa votación. Yo creo que el resultado siempre ha sido el mismo, o sea venía pre concebido (...).
- ¿Qué puede significar para la industria la creación del fondo único para la salud?
-Va a depender de la forma y de la mecánica de transición que se acuerde. Nosotros creemos que el asegurar la salud es un bien que no se puede erradicar por decreto, la gente va a necesitar seguir estando asegurada, y va a seguir demandando seguros de salud, por lo tanto para las isapres significa volver a atender bajo otra modalidad.
- ¿Cómo sería le nuevo modelo de negocios?
-Dejarían de existir los seguros complementarios, porque éstos complementan lo que las isapres pagan, y las isapres pasarían a denominarse empresas privadas de la seguridad social, o algo por el estilo y venderían seguros suplementarios. Lo que pasa es que esos seguros suplementarios van a ser accesibles para un porcentaje de la población mucho menor.
- ¿Cuánto se podría encarecer el sistema para los que opten por los seguros?
-El 7% que tu ya pagas, lo perdiste, tendrías que volver a poner otro 7% de vuelta para poder volver a restablecer los niveles de satisfacción de salud que tú querías mantener. O sea, esto se transforma en un impuesto directo a la vena para la gran clase media, que si no tiene un 7% adicional, no va a poder volver a comprar en salud privada que le gustaba y va a tener que enamorarse de Fonasa.
- ¿Qué va a pasar con el sector prestador?
-Va a sentir un impacto enorme al retirarse del sistema US$ 2.500 millones, y al manejar esos recursos un solo comprador. Sobre todo si se está hablando de fijación de precios a ese sector.
- ¿Cómo se va a defender la industria si esta opción sigue adelante?
-La gran defensa la van a dar 2,5 millones de personas, que van a sentir vulnerados sus derechos constitucionales, que van a sentir vulnerada la propiedad de su contrato de salud, que se van a sentir despojados de sus planes, que van a perder el 7% de su cotización, y que van a tener que hacerse cargo ganando menos de $1,5 millón al mes, de una reforma tributaria encubierta.