General Motors (GM) anunció hoy que devolverá al Gobierno estadounidense
US$ 2.100 millones con la compra de acciones en manos del Estado
y que adoptará una serie de medidas financieras para reducir "deuda y
mejorar" la financiación de las pensiones.
El Departamento del
Tesoro dijo a través de un comunicado que ha aceptado la oferta de GM
para la recompra de US$ 2.100 millones en acciones preferentes de
la serie A emitidas bajo el Programa de Alivio de Activos Depreciados
(TARP, por su sigla en inglés).
"Con esta recompra, los
contribuyentes habrán recibido un total de US$ 9.500 millones de
GM mediante devoluciones, intereses y dividendos desde que la compañía
salió de la quiebra en julio del 2009", dijo el Departamento del Tesoro.
Las autoridades estadounidenses dijeron que tras la recompra, el
Tesoro verá reducida su participación en GM del 61% al 60,8%. La operación se producirá tras el regreso de GM a la bolsa.
A finales de 2008, durante la administración del presidente
estadounidense George W. Bush, GM recibió US$ 13.400 millones del
Departamento del Tesoro. Posteriormente, en 2009, la empresa recibió
otros US$ 30.100 millones de los que GM habrá devuelto US$ 9.500
millones tras la recompra de las acciones.
Las
otras medidas anunciadas hoy por GM incluyen la devolución de US$ 2.800
millones de un pagaré proporcionado al Fondo de Beneficios Médicos para
Pensionistas del sindicato United Auto Workers (UAW) y el acuerdo de un
crédito renovable de cinco años por valor de US$ 5.000 millones.
GM también dijo que contribuirá con al menos US$ 4.000 millones en efectivo y US$ 2.000 millones en acciones a los planes
de pensiones de sus trabajadores de oficina y factoría.
El
tesorero de GM, Dan Ammann, dijo que con la "terminación de estas
acciones seremos capaces de reducir el coste neto de intereses y
dividendos preferidos en US$ 500 millones al año".