El Plan de Fortalecimiento Industrial del Biobío, como se denomina la iniciativa, "tiene por objetivo abordar los desafíos productivos estructurales de mediano plazo de la región y, simultáneamente, las consecuencias de corto plazo del cierre de la Compañía Siderúrgica de Huachipato", estipuló un documento en el que se detalló la iniciativa y fue divulgado hoy.

Ministro de Economía, Nicolás Grau, lideró la gestación de la iniciativa que busca revivir el auge industrial de la zona.
"Para ello se propone un conjunto de medidas que, en primer lugar, disminuyan el impacto laboral y productivo de corto plazo del cierre de la Compañía Siderúrgica de Huachipato, en segundo lugar, reviertan, en el corto y mediano plazo, las pérdidas de empleo, producción e infraestructura industrial que ha sufrido la región en los últimos años y, en tercer lugar, articulen, en conjunto con el Gobierno Regional, un plan fortalecimiento industrial en alianza con los representantes de los trabajadores, las empresas y sector académico", resumió el documento.
En el texto se precisó el impacto del cierre de Huachipato. La siderúrgica registró un total de US$ 584 millones en compras en un año, lo que representó el 13,8% de las compras realizadas por empresas manufactureras de la región del Biobío. Hay 1.543 empresas proveedoras directas de la acerera, con ventas aproximadas de US$ 450 millones. De este universo, 548 empresas tienen su casa matriz ubicada en la Región del Biobío, y representan el 29% de las ventas de Huachipato, aproximadamente US$ 131 millones.
A raíz de ello, el plan se organizó en cinco ejes: apoyo y acompañamiento a empresas proveedoras de Huachipato en riesgo; reinserción, movilidad laboral y acompañamiento para el resguardo de garantías laborales; acelerar la inversión pública y privada; reactivación y fortalecimiento de la industria en el mediano y largo plazo y; recuperación en el mediano plazo de la producción nacional de acero.