Abercrombie se rinde ante auge del retail online y se pone en venta
American Eagle y Express serían las dos primeras firmas en mostrar interés por la minorista de moda para jóvenes.
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Abercrombie & Fitch reconoció ayer que no ha logrado seguir el paso del comercio electrónico que ha golpeado sus ventas en tiendas físicas y a los cambios de preferencias de sus clientes, por lo que decidió colgarse el cartel de “Se Vende” para iniciar un proceso de evaluación de ofertas.
Sus rivales estadounidenses, American Eagle y Express, serían las dos primeras interesadas en el negocio dirigido a los millennials, y las conversaciones –que estarán lideradas por el banco de inversiones Perella Weinberg Partners– ya se habrían iniciado.
El anuncio impulsó nuevamente las acciones de la compañía hasta un 14% previa apertura de bolsa, luego de haber registrado una caída de 61% desde su último peak en marzo de 2016 y de estar cotizando en mínimos de 17 años.
La decisión de salir a la venta llega en momentos en que los minoristas estadounidenses están cerrando tiendas y acogiéndose a bancarrota a un ritmo no observado desde la crisis financiera de 2009.
Mantenerse a flote
Ante el rápido avance del e-commerce que ha ido apoderándose cada vez más de la cuota de mercado de los establecimientos tradicionales, compañías como Abercrombie luchan por mantenerse a flote.
La minorista de moda para jóvenes anunció en mayo el cierre de 60 tiendas en EEUU, reduciéndolas a 674, una cifra 20% menor que las que tenía en 2013.
La decisión es producto de los decepcionantes resultados del cuarto trimestre fiscal de 2017 (noviembre-enero), en el que las ventas en mismas tiendas cayeron 13%.
Sears, Macy’s, JCPenney, y más de una docena de retailers también han anunciado la clausura de sus espacios este año. Hasta el momento, la cifra total en el país se ubica en 3.200 tiendas.
Cambio de estrategias
En un intento por recuperar clientes, Abercrombie ha relanzando su marca y rediseñado sus tiendas para que sean más atractivas y menos parecidas a un local nocturno.
Además de ello, en lo que fue considerado un gran cambio de estrategia, dejó de imprimir sus logos en todas las piezas en respuesta a los cambios en las preferencias de sus clientes que piden prendas con menos identificación.