Norwegian Cruise Line, el tercer operador de cruceros del mundo, llegó a un acuerdo para la adquisición de Prestige Cruises International por
US$ 3.030 millones en efectivo y acciones, deuda incluida, para diversificar su oferta.
La adquisición de Prestige permite a Norwegian hacerse con Oceania Cruises, que cuenta con cinco cruceros, y Regent Seven Seas, que posee otros tres barcos.
“La adquisición de Prestige supone una oportunidad extraordinaria para que Norwegian Cruise Line aumente su cuota de mercado incorporando dos marcas reconocidas y premiadas”, aseguró Kevin Sheehan, consejero delegado de Norwegian.
Con sede en Miami, Norwegian cuenta con catorce grandes cruceros, entre ellos el Norwegian Epic, que se estrenó en junio de 2010, y el Norwegian Breakaway, entregado a la compañía en abril de 2013, y su gemelo el Norwegian Getaway.
La concreción del acuerdo daría a Norwegian Cruise, valorada en US$ 6.800 millones, acceso a los cruceros de lujo y la adinerada clientela de Prestige Cruises en un momento en que compite con grandes rivales como Royal Caribbean Cruises y Carnival.
Hasta ahora, Prestige Cruises estaba controlada por Apollo Global Management, que también controla el 20% de Norwegian.