En Nueva York sorprendió al canciller argentino, Héctor Timerman, la sorpresiva muerte del fiscal argentino, Alberto Nisman, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida en su residencia en Puerto Madero. El fiscal se encontraba investigando el atentado contra la Asociación Mutual Israelita en Argentina Amia, ocurrido en 1994.
En medio de la sesión del Consejo de Seguridad de la ONU, presidida por la presidenta Michelle Bachelet, y tras su intervención, el secretario de Estado trasandino comentó con la prensa lo sucedió en Buenos Aires.
"Me apena mucho el fallecimiento de una personas, más de una que la conocía. Espero que la justicia prontamente pueda determinar la forma en que murió, que la justicia esclarezca la muerte de una persona joven", fue su primera reacción.
Consultado respecto a los costos en la imagen internacional del país por este hecho, señaló que "Argentina tiene créditos en materia de derechos humanos, como para que sepan que se va a llegar a resolver este tema, y se sabrá cómo murió".
Respecto al curso de la investigación, en donde justamente hoy el fiscal iba a presentar pruebas que podrían involucrar al actual gobierno como encubridor de los hechos, señaló que "no conozco las pruebas que iba a presentar, solo sé que dijo que yo quería dar de baja las alertas rojas, y el propio ex secretario general de Interpol quien dijo que no era cierto"
Al finalizar, señaló que aun no ha hablado con la presidenta Cristina Fernández sobre el tema, y que espera que la fiscalía siga trabajando en la investigación del atentado tal como se venía haciendo hasta ahora.