La Comisión Europea dijo ayer que va a “trabajar de manera constructiva” con el Reino Unido sobre los términos de su salida de la Unión Europa, pero sólo una vez que Londres notifique formalmente a Bruselas su intención de marcharse.
La primera ministra británica, Theresa May, dijo el domingo que activará el proceso de salida a través de una notificación formal antes de abril de 2017, lo cual arroja luz sobre el calendario para el divorcio que redefinirá los vínculos del Reino Unido con su mayor socio comercial. Sin embargo, la jefa del gobierno británico manifestó su esperanza de comenzar a discutir los términos para una salida de una manera no oficial antes de esa fecha.
“Trabajaremos de manera constructiva sobre la base de una notificación, no de un discurso, y hasta que esta carta de notificación no llegue no habrá negociación”, dijo ayer el portavoz de la comisión, Margaritis Schinas, en la rueda de prensa diaria del Ejecutivo comunitario. Consultado si la comisión llevará a cabo un trabajo de preparación antes de la notificación para facilitar las negociaciones posteriores, que podrían llevar dos años, Schinas declaró: “mucha gente tiene ideas diferentes sobre lo que debería ser el trabajo preparatorio. Para no entrar en este territorio interpretativo, preferiría quedarme con el principio que todo el mundo conoce: sin notificación no hay negociación”.