La firma aronáutica estadounidense Boeing pidió disculpas a las aerolíneas por los problemas en su avión Dreamliner 787, lo que a su vez ha obligado a dejar en tierra a la flota de su modelo, según informó Reuters.
Ante esto, la firma se comprometió a restaurar la confianza en su nuevo avión, tras una serie de incidentes que generaron una investigación de seguridad de Estados Unidos y la prohibición de los vuelos.
El principal ingeniero del programa del Boeing 787, Mike Sinnett, señaló que la compañía sigue confiando en la seguridad del avión, que no puede volar desde la semana pasada debido a un posible riesgo de incendio tras dos incidentes que involucraban a baterías de iones de litio.
Sinnett habló en una conferencia de aviación en Dublín, a la que los medios no tuvieron acceso. Sin embargo, una grabación de sus comentarios fue suministrada a Reuters.
"No puedo realmente hablar sobre los plazos de la investigación. La Dirección Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB) es en realidad la única autoridad con permiso en Estados Unidos para hablar sobre esta investigación y realizaron algunos anuncios recientes, pero no puedo especular sobre el lapso de tiempo", afirmó Sinnett.
"Nuestro compromiso para con nuestros clientes sigue siendo que resolveremos los problemas tan pronto como sea posible y reduciremos todo lo posible las interrupciones", concluyó.