El déficit en el presupuesto del
Gobierno de Estados Unidos creció en mayo en US$189.700 millones, debido a la caída en las recaudaciones y a los enormes
gastos en programas de estímulo económico y socorro financiero.
Según el Departamento del Tesoro, en los ocho primeros meses del
año fiscal 2009 el déficit del presupuesto asciende a US$991.900
millones, comparado con uno de US$319.400 millones en el
período similar el año fiscal 2008.
El informe mostró que en mayo los gastos sumaron US$306.900 millones, un 6% más que en mayo de 2008, entre los que
se incluyen US$18.000 millones del programa de socorro para
los bancos, las instituciones financieras y las empresas fabricantes
de vehículos automotores.
Las recaudaciones gubernamentales en mayo fueron de US$117.200
millones, una disminución de 6% en relación a
mayo de 2008.
En comparación con los ocho primeros meses del período fiscal
2008, las recaudaciones cayeron 18% y sumaron US$1,37
billones, las más bajas en cuatro años. Los gastos
subieron 19% y completaron US$2,37 billones.
Para todo el año fiscal, que concluye el 30 de septiembre, el
Gobierno del presidente Barack Obama, que heredó la peor recesión
económica en siete décadas, calculó que el déficit ascenderá a US$1,84
billones.