China dio un nuevo paso hacia aumentar el rol global de su moneda, al permitir que las empresas locales saquen renminbis al extranjero con fines de inversión.
El cambio llegó justo cuando el Banco Popular de China permitía que el nivel de referencia para las fluctuaciones diarias de la moneda se fortaleciera a un nivel de 6,6 renminbis por dólar por primera vez ayer, un día después de que Tim Geithner, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, reiterara sus preocupaciones por la política monetaria de China.
El renminbi, que muchos socios comerciales de China consideran subvaluado, será parte de las discusiones la próxima semana entre el presidente chino, Hu Jintao, y su contraparte estadounidense, Barack Obama, en Washington. Las empresas han podido usar el renminbi para realizar transacciones comerciales internacionales desde julio de 2009, bajo una iniciativa para reducir la dependencia de Beijing del dólar.
Según el Banco Popular de China, las compañías de China continental pueden ahora usar el renminbi para emprender negocios en el exterior y financiar adquisiciones.
Este es un paso importante para internacionalizar el renminbi, dijo Dariusz Kowalczyk, estratega de Crédit Agricole. Es significativo porque entregará medios adicionales para que el renminbi viaje fuera de China.
Pese a que no hay un límite establecido para el tamaño de las inversiones, las empresas chinas aún deben postular a la aprobación del gobierno para enviar renminbis al extranjero, tal como deben hacerlo con las inversiones acordadas en moneda extranjera.
Será interesante ver si los vendedores extranjeros de compañías que los chinos quieren comprar estarán dispuestos a aceptar renminbis, acotó Kowalczyk.
Las empresas extranjeras tienen pocas formas de usar renminbis, además de comprar bienes de China, depositarlos en cuentas y bonos de bajo rendimiento o canjearlos por otras monedas. China mantiene controles estrictos sobre la inversión extranjera.
El comercio acordado en la moneda china sumó 340 mil millones de renminbis (US$ 51 mil millones) entre junio y noviembre, según el banco central, frente a cero hace un año y medio.
Bancos internacionales como HSBC, JPMorgan Chase y el sudafricano Standard Bank ya ofrecen servicios de acuerdos de comercio en renminbi. Según banqueros, el gobierno está alentando a las grandes empresas estatales a realizar adquisiciones en renminbis en lugar de otras divisas.
Hong Kong tiene un mercado de productos financieros denominados en renminbis que es pequeño, pero de rápido crecimiento, y que está abierto a los inversionistas internacionales.
China intenta convertir al renminbi en una moneda global para el comercio sin abandonar los controles a los movimientos de capital, una jugada que será cada vez más difícil a medida que el renminbi se acumula en el extranjero, advirtieron economistas.