La acción de Peugeot llegó a caer hasta 12% luego de que se revelara una posible venta de acciones a la automotriz china Dongfeng y al propio gobierno francés, aunque luego repuntó para cerrar con una baja de 9%.
La empresa asiática declaró que pretende invertir
US$ 1.630 millones y así obtener el 30% de Peugeot, con la que ya es socio en un joint venture llamado Chinese DPCA, mediante el cual buscan ampliar su gama de vehículos, inyectar mayor tecnología a su fabricación y así ingresar a más mercados asiáticos.
En tanto, el ministro de Finanzas francés, Pierre Moscovici, declaró a Bloomberg que “el Estado está interesado en Peugeot”, sin entregar mayores detalles.
“Peugeot confirma que está analizando nuevos proyectos industriales y comerciales con diferentes socios, así como el financiamiento para acompañarlos”, dijo un portavoz de la firma. “Ninguno de estos planes ha llegado a una etapa avanzada”.
Con esta venta, la familia Peugeot perdería el control de la compañía porque la inyección de dinero diluiría su participación actual correspondiente al 25,4% y su 38,1% de derechos de votación. El capital del importe es de alrededor 3.000 millones de euros (US$ 4.100 millones), monto importante considerando la actual capitalización bursátil de Peugeot, la que corresponde a 4.000 millones de euros.
La compañía francesa ha sido una de las empresas más afectadas por los seis años de caída de las ventas de automóviles en Europa, ante lo que está buscando más cooperación con Dongfeng u otra automotriz mientras afronta dificultades para disminuir costos y pérdidas que han amenazado su supervivencia.
Un aumento de capital le proporcionaría a Peugeot el dinero necesario y la ayuda para concretar sus esfuerzos de expandirse fuera de Europa, debido a la fuerte contracción que tuvo la marca estos últimos seis años. La automotriz francesa reportó una pérdida operacional en su unidad automotriz del primer semestre de 510 millones de euros
(US$ 692 millones). Asimismo, está recortando 11.200 empleos en Francia y cerrará una fábrica en las afueras de París. El fabricante de automóviles se ha comprometido a reducir su nivel de gasto en 50% en 2013 después de gastar 3.000 millones de euros el año pasado.
Una delegación francesa de ejecutivos, funcionarios gubernamentales y banqueros se dirige prontamente a China para negociar un bosquejo para el acuerdo que podría firmarse en semanas, dijeron tres fuentes que pidieron no ser identificadas porque las conversaciones son confidenciales.