Por Cary Huang
Los analistas están divididos respecto de si la elevada tasa de inflación al consumidor del mes pasado y las señales de crecimiento lento provocarán algún cambio o sintonía fina de la política de ajuste ya en marcha.
El sábado, la Oficina Nacional de Estadísticas dijo que el índice de precios al consumidor subió 6,4% en junio, un incremento notable respecto del 5,5% de mayo y bien por encima de la meta anual del gobierno de 4%.
Para controlar la políticamente sensible tasa de inflación al consumidor, el gobierno inició una serie de medidas de ajuste el año pasado. El banco central ha elevado el ratio de requerimiento de reservas (RRR) seis veces sólo en el primer semestre de este año, ordenando a los bancos mantener 21,5% de sus depósitos (un máximo) como reservas, en un esfuerzo por controlar el exceso de colocaciones.
Beijing también ha subido las tasas de interés cinco veces desde octubre, la última vez el miércoles.
Los economistas dijeron que una inflación alta a fines del año pasado también implica que las tasas de interés se verían más bajas en los próximos meses cuando se las comparte con el mismo período del año anterior.
El premier Wen Jiabao dijo que el gobierno mantendría la actual dirección de la política macroeconómica, manteniendo la estabilidad de precios como objetivo principal. Sin embargo, Wen dijo que el gobierno “ajustaría la dirección, fortaleza y ritmo de su política macroeconómica” a medida que el desarrollo económico se hace “complicado” con varios factores inciertos.
Pero, el presidente del banco central, Zhou Xiaochuan, fue más ambiguo. China “puede tolerar un cierto grado de inflación”, dijo en un discurso en la Universidad Tsinghua el fin de semana. “Es difícil para el banco central de China establecer sólo un objetivo, el de controlar la inflación”.
Anticipando crecimiento e inflación más lentos en el segundo semestre, los observadores esperan que las políticas macro cambien para asegurar el crecimiento.
También hay una oposición creciente a la política de ajuste con más autoridades regionales y economistas pidiendo el fin del ciclo de alza de tasas e incrementos en los ratios de reserva. Tim Condon, jefe de investigación de ING para Asia, dijo que interpretaba los comentarios recientes de Wen como evidencia de que el balance de riesgos para las autoridades se ha inclinado de inflación a crecimiento.
Pero Qu Hongbin, economista jefe para China en HSBC, dijo que las presiones inflacionarias persisten, se espera que la política monetaria siga ajustada a lo largo del tercer trimestre.
Wang Tao, economista jefe para China de UBS Securities, dijo: “Si el IPC de julio es igual o más alto que la lectura de junio, pensamos que puede haber otra alza de tasas en agosto. Fuera de esa alza, esperamos que la actual instancia prudente se mantenga”.