Por María Ignacia Alvear C.
El Banco Central de Suiza (SNB) sorprendió ayer al imponer un techo para el franco, una medida que no se aplicaba desde 1978 para frenar las ganancias de su moneda frente al franco alemán, y se comprometió a defender la divisa con “la mayor determinación”.
El anuncio refleja la creciente tensión a nivel mundial por la caída de las principales monedas y podría anticipar el inicio de una guerra de devaluaciones competititivas. El anuncio de las autoridades en Suiza se suma a pasos similares implementados en Brasil en las últimas semanas y para hoy se esperan nuevas medidas de parte de Japón.
En medio de los temores a una nueva recesión y las pobres cifras económicas en EEUU y la eurozona, el dólar y el euro se han depreciado respecto del resto de las monedas del mundo. Aunque las autoridades en Bruselas y Washington no han promovido intencionalmente la caída, la tendencia probablemente no les desagrada, ya que una divisa débil mejora la competitividad de sus exportadores e impulsa así la recuperación.
La contraparte, sin embargo, es la pérdida de competititividad de otras monedas, y una de las más golpeadas en ese sentido es el franco suizo, que es considerada por los inversionistas como un refugio seguro ante la crisis en Europa. Hasta antes del anuncio, el franco acumulaba un alza de 13% respecto del euro este año.
El instituto emisor suizo aseguró ayer que “no tolerará más un tipo de cambio con el euro por debajo del piso de 1,20 francos” y para desmotivar a los especuladores declaró que “está preparado para comprar divisa extranjera en cantidades ilimitadas”.
Tras sus palabras, el franco se depreció 9% frente a la moneda comunitaria y la medida fue celebrada por las empresas locales. “Es un primer paso”, indicó Interpharma, grupo que representa a farmacéuticas como Roche Holding y Novartis.
Recordando la experiencia de 1978, los analistas creen que la jugada del SNB podría resultar también esta vez. En ese entonces, el banco pudo mantener el cambio 0,8 franco por marco hasta 1998, cuando Alemania adoptó el euro. No obstante, existe un riesgo: durante ese período, la inflación suiza superó la meta de 2% durante doce años. “Si en algunos trimestres más el euro/franco ha podido mantener la estabilidad o incluso registrar algunas alzas, sin que la inflación suiza se vaya a las nubes, entonces el SNB podrá decir que tuvo éxito”, comentó a Bloomberg el estratega en moneda extranjera de UBS, Geoffrey Yu.
Guerra de divisas
Al igual que el franco, el yen japonés también se ha convertido en una moneda de refugio para los inversionistas, presionándola al alza. En agosto, el Banco de Japón intervino en el mercado por tercera vez este año para frenar su avance. Y el ministro de Finanzas, Jun Azumi, dijo ayer que utilizará la reunión de autoridades del G7 el viernes para subrayar el peligro que el alza representa para su economía. Tras estas declaraciones los observadores esperaban que el instituto emisor anuncie hoy un incremento en su programa de compra de activos.
Brasil es otro de los países que está interviniendo para evitar la apreciación del real. Tras recortar la tasa de interés sorpresivamente en su reunión del 31 de agosto, la divisa profundizó su caída y ya acumula una baja de 7% frente al dólar desde julio.
La tendencia ya comienza a generar inquietud en Argentina, el principal socio comercial de Brasil en el Mercosur. Aunque los efectos aún no son evidentes, los empresarios argentinos están comenzando a presionar a las autoridades locales para que defiendan la competitividad de los productores nacionales.
Blanco de especuladores
El ministro de Hacienda de Brasil, Guido Mantega, reconoció que la decisión suiza podría ayudar a aliviar la presión sobre el franco, pero descartó que la medida pudiera funcionar en su país.
“Es una medida extrema que nace de la desesperación”, dijo, agregando que los intentos pasados del país sudamericano en fijar una tasa de cambio habían fallado y que es preferible mantener su régimen de moneda flotante.
El ministro dijo que habrá que esperar para ver si la moneda suiza resiste el ataque de los especuladores.
Corona Noruega: próximo blanco
Los inversionistas que están buscando un nuevo refugio seguro después de la decisión del banco central suizo deberían voltear la mirada hacia la corona noruega, señaló un informe del banco HSBC.
“Hemos dicho por un largo tiempo que la corona es un mejor refugio seguro que el franco”, dijo en una nota a clientes el jefe global de estrategia de divisa del banco, David Bloom. “En casi todos los aspectos, la corona tiene mejores cualidades”, añadió.
La divisa noruega ha atraído a inversionistas por el 10,5% de superávit presupuestario de Noruega del año pasado, el mayor de los países calificados con AAA. El país nórdico, que tiene la menor tasa de desempleo de Europa, ha sido blindado de la peor crisis económica gracias a sus reservas de petróleo.
Pero las autoridades noruegas ya han tomado nota de la tendencia que está afectado a economías como Suiza y Japón y han advertido que actuarán si las alzas de la moneda comienzan a perjudicar las exportaciones.