Verizon podría lanzar hoy mismo su megaemisión de bonos, que superará con creces los US$17.000 millones en deuda colocados el pasado mes de abril por Apple, hasta ahora la mayor emisión corporativa de la historia.
La operación, que supone una emisión de bonos por un importe de US$49.000 millones, servirá para financiar buena parte de los US$130.000 millones acordados en la compra del paquete accionarial que ostentaba Vodafone en su joint venture Verizon Wireless.
Los analistas esperan que los intereses ofrecidos por la empresa estadounidense superen las rentabilidades que presentan los bonos de Verizon ya existentes, de ahí también la acogida entusiasta que tiene la operación.
Verizon ha recibido peticiones por un importe superior a los US$90.000 millones, según fuentes cercanas a la emisión.
Este éxito de demanda llevó a la compañía de telecomunicaciones a duplicar con creces sus objetivos iniciales de adjudicación, que se limitaban a unos US$20.000 millones.
La macroemisión incluye varios tramos de bonos: en el caso de los títulos a 10 años, podrían incluir una prima de unos 225 puntos básicos respecto a los bonos equivalentes del Tesoro estadounidense.
El lanzamiento de la operación se produce además una semana antes de la decisiva reunión de la Reserva Federal. Los analistas no descartan que sea en esta cita cuando la Fed decida si reduce su programa de compra de deuda, con el consiguiente efecto en los intereses de los bonos.