Los mercados recelan de las medidas del gobierno griego para desmantelar el "cruel" programa de austeridad fijado en el rescate. Después de la rebaja de ráting de S&P, la deuda griega sufre otra desbandada, y la espiral bajista se reactiva en la Bolsa de Atenas.
La semana arranca con nuevas alertas en Grecia, y con un resurgir de las turbulencias tanto en la deuda griega como en la Bolsa de Atenas. Las dos últimas jornadas de la semana pasada enfriaron la renovada euforia de las sesiones anteriores, cuando la renta variable llegó a dispararse cerca de un 15% en dos días.
El pasado viernes la Bolsa de Atenas ya bajó un 2%, y los números rojos se agravaron en la sesión de hoy, con caídas que llegaron a superar el 5%. Finalmente el retroceso fue de 4,75% y el índice de referencia perdió los 800 puntos, arrastrado por las pérdidas de los bancos, cercanas a los dobles dígitos.
Los recelos de los inversores hacia la deuda griega se reactivan después del a rebaja de ráting anunciada el pasado viernes por Standard & Poor's. La agencia estadounidense recortó su calificación crediticia sobre Grecia desde 'B' hasta 'B-', debido a las dudas sobre un posible acuerdo con la troika. Además, situaba su perspectiva crediticia en 'negativa', por lo que abre la puerta a nuevos recortes.
Resurge el temor a una salida de Grecia del euro
A la rebaja de ráting se suma además el tono desafiante del nuevo Gobierno de Atenas durante el fin de semana. Su presidente, Aleix Tsipras, lanzó una serie de promesas para contrarrestar el "cruel" programa de austeridad impuesto por el rescate financiero.
El ministro de Finanzas, Yanis Varoufakis, fue más allá incluso al advertir del derrumbre que sufriría el euro en el caso de una salida de Grecia de la eurozona.
La respuesta de los analistas es un creciente temor a que Grecia, finalmente, tenga que salir del euro. Desde LNG Capital elevan esta posibilidad desde el 35% previo hasta el 50%, y el expresidente de la Reserva Federal Alan Greenspan sotiene que es sólo "cuestión de tiempo" que Grecia abandone el euro.
El tono desafiante del nuevo Gobierno griego eleva la tensión de cara a la decisiva reunión extraordinaria del Eurogrupo del próximo miércoles, convocada para intentar acercar posiciones sobre la deuda griega.