La semana pasada el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC) inició un proceso para analizar si es que recomienda obligar la desmutualización e interconexión de las bolsas, tal como pide la Fiscalía Nacional Económica. Tras esto, las bolsas de Valparaíso y Electrónica aplaudieron la medida, sobre todo en lo que tiene que ver con la unión de las plazas, lo que es visto como una "expropiación" por algunas corredoras de la Bolsa de Comercio de Santiago.
En ese contexto, Dieter Linneberg, director ejecutivo del Centro de Gobierno Corporativo de la Universidad de Chile, dice que se "debe distinguir entre ambas propuestas, que no están necesariamente conectadas, ni tienen la misma relevancia para el mercado de valores nacional". La apuesta del académico es avanzar decididamente en la interconexión, y luego, tras ver los efectos, trabajar en la desmutualización.
-¿Qué conflictos ve ud. hoy en el funcionamiento de las bolsas?
-Las corredoras, siendo dueñas de las bolsas, no cuentan con los incentivos adecuados para actualizar permanentemente sus mecanismos de control, así como para profundizar en sus actuales operaciones ni para buscar nuevos. En efecto, es llamativa la ausencia de nuevas IPO. Si bien esta materia depende mucho del interés de los emisores, la labor de las bolsas y corredores para facilitar esto objetivo es una fundamental, procurando crear índices o mecanismos que permitan hacer de interés de los emisores su participación en las bolsas, no sólo desde un punto de vista financiero, sino que también reputacional.
-¿Qué le parece la propuesta que analiza el TDLC de desmutualizar e interconectar las bolsas?
-Se debe distinguir entre ambas propuestas, que no están necesariamente conectadas, ni tienen la misma relevancia para el mercado de valores nacional. Dicho lo anterior, resulta necesario avanzar decididamente en la interconexión en tiempo real y automática de las órdenes que dan en cualquiera de las bolsas. El mercado bursátil es uno solo y las bolsas no son sino las puertas de entrada a ese mercado único. Los beneficios de reconocer esa conclusión obvia y lógica, es que desde un punto de vista de libre competencia, las bolsas que cuenten con los elementos para atraer a emisores e inversionistas compradores y vendedores.
A su vez y desde una perspectiva de mercado de valores, tal circunstancia debiera evitar arbitrajes entre los precios reflejados en las bolsas, así como reducir el efecto que la fragmentación actual del mercado bursátil puede generar en los precios y volúmenes transados.
-¿Y la desmutualización?
-La desmutualización siempre ha sido expuesta como una alternativa de solución a los conflictos de interés que las bolsas mutualizadas producen. Pero nuestra duda es si es la única solución, como lo plantea la petición de la FNE al TDLC, y estimamos que no lo es. Existen otras alternativas desde el punto de vista de gobierno corporativo, que se podrían implementar, para atacar los conflictos de interés que se acusan y aquellos otros que pudieran existir.
-¿Cómo se debe proceder entonces?
-Es preferible avanzar en la interconexión y sólo tras contar con la nueva información producida por dicha nueva realidad, desconocida a la fecha, se podría avanzar en el sentido de una posible desmutualización, la que creemos es una de varias alternativas, no la única, lo que debiera conducir a que no se obligara a su implementación, sino se ofreciera como una de varias alternativas. Avanzar sin esa información a la desmutualización soslaya que se podrían provocar conflictos de interés entre otros problemas, hasta hoy desconocidos.
-¿Cuál será el efecto que tendrán estas medidas de implementarse?
-De implementarse la interconexión en tiempo real y automática, contando para ello todas las bolsas con requisitos objetivos para la interconexión (...) debiera traducirse en una mejor formación de precios reales, mayor competencia entre las bolsas para captar a los agentes del mercado. Esto último dado que a través de cualquier bolsa que cumpla con los requisitos objetivos de interconexión se podría acceder a ese único mercado. No creemos que haya mayores montos o transacciones, pues ello depende de nuevas medidas a nivel público y privado, aunque la falta de fragmentación debiera conducir a mejor formación de precios y ello a mayor confianza, lo que debiera redundar, en el mediano a largo plazo, en el posible regreso de inversionistas, sujeto a otros factores.
En cuanto a la desmutualización, sus efectos debieran ser corregir algunos de los conflictos que actualmente están presentes, pero probablemente se debieran generar otros.
-La BCS ya está analizando la desmutualización ¿es preferible que salga por el TDLC o la misma bolsa?
-Hoy si las bolsas se quieren desmutualizar lo pueden hacer. Luego, la petición de la FNE es que se las obligue a desmutualizarse. Pero lo que cabe preguntarse es si es la única opción para corregir los conflictos que se quieren enfrentar, lo que no creemos. (...) Entonces, y existiendo otras posibilidades de solución, alternativas a la desmutualización, por qué no explorar esas opciones, antes que establecer un solo modelo que probablemente va a requerir nuevas correcciones e implementaciones y, por tanto, más costos y riesgos.
-¿Qué medidas?
-Hay varias, entre otras, implementar prácticas fuertes (no principios generales como se escucha a muchos al hablar del gobierno corporativo), consistentes y concretos de buen gobierno corporativo.
También podría explorarse el mecanismo intermedio de que las bolsas establecieran exigencias objetivas uniformes de seguridad, probidad, solvencia y capacidades tecnológicas para que cualquier corredor pueda operar en la bolsa, lo que podría conducir -tras pasar por un proceso de aprendizaje- a una desmutualización, pero de manera gradual que permita conocer problemas y permita su oportuna corrección y no sólo como consecuencia de un conflicto insalvable.
-Según la FNE, aunque legalmente existe interconexión y hay un mandato, en la práctica no se ha dado ¿ha faltad voluntad de algunos actores?
-Es difícil poder interpretar las causas de por qué se ha producido ello, pero si cabe dar cuenta que con la tecnología actual no se vislumbran inconvenientes serios a que se puedan interconectar en tiempo real y con calce automático las bolsas de valores.
Hugo Caneo: "El directorio de SQM dio una potente señal de preocupación y cuidado"
Al finalizar el jueves pasado, el directorio de SQM anunció la creación de un comité ad hoc para que investigue internamente el uso de boletas para el pago de campañas políticas, medida que es celebrada por Hugo Caneo, ex jefe de cumplimiento de la SVS. "Tal medida corresponde a una buena práctica de gobierno corporativo, el cual es asumir el liderazgo que le compete al directorio, se designe a un grupo de ellos para que ponga especial atención y foco en esta materia, para luego proveer de esa información y conclusiones para la decisión del directorio como cuerpo", indica.
Caneo, hoy director de Estudios del Centro de Gobierno Corporativo de la Universidad de Chile, agrega que con la medida tomada por el directorio de SQM, ésta "da una potente señal de preocupación y de cuidado de los intereses de la sociedad de la que son administradores, por lo que claramente es una medida adecuada".
Quien fuera fiscal del holding de empresas públicas SEP, también aborda la cuestionada autorregulación de las bolsas en medio de los casos que han surgido desde La Polar, indicando que son "un llamado a nunca estar satisfechos, a permanentemente innovar y actualizar las normas y prácticas en las bolsas".
A esto agrega que las plazas bursátiles "debieran enviar potentes señales al mercado dando cuenta de qué se están haciendo cargo de los problemas que se pueden haber detectado mediante la reinvención o adaptación de sus mecanismos, estructuras y prácticas de gobierno corporativo". Esto, añade, "debiera ser un paso esencial e ineludible, siguiendo un proceso claro y conocido por el regulador, que les permita alcanzar los objetivos que se determinen más adecuados para nuestro mercado".
Finalmente, Caneo señala que "es mejor ser proactivo y no reactivo, para efectos de que los distintos agentes, emisores, inversionistas e intermediarios tengan la confianza necesaria para operar, así como la libertad para crear nuevas herramientas de movilización de recursos financieros no sólo de Chile, sino que de otros países de la región".