La Bolsa
de Tokio quebró hoy la buena racha que le llevó el viernes a cerrar su mejor
semana desde octubre y se desplomó 4,53% su mayor caída intradía en dos meses,
después de la negativa del Gobierno de Estados Unidos a apoyar los planes de
viabilidad de las automovilísticas GM y Chrysler.
La desconfianza volvió a los inversionistas asiáticos de la
mano de los planes del Gobierno de Barack Obama de no aceptar las propuestas de
viabilidad presentadas tanto por General Motoros (GM) como por Chrysler, y que
obligará a esta última a fusionarse con Fiat. Una decisión que ya cobró a una
primera víctima: Rick Wagoner, el presidente de GM.
La Bolsa
de Tokio, la principal referencia para los mercados asiáticos, cerró con una caída
de 4,53%, el mayor que sufre en un día desde el 15 de enero, hasta los 8.236
puntos.
Además, con estas pérdidas de hoy borra una gran parte del
avance del 8,6% cosechado en el conjunto de la semana pasada, su mejor racha
desde el mes de octubre.
Las noticias llegadas desde Estados Unidos provocaron un
recorte del 1% en el cambio del dólar frente al yen, hasta los 96,98 yenes, y
han lastrado la cotización de las principales compañías dedicadas a la
exportación, como Canon y Sony, que perdieron un 4% y un 7,4%, respectivamente.
El sector financiero ha sido otro de los grandes
damnificados de la información que llegó anoche desde la mayor economía del
mundo. Mizuho perdió un 8,8%, Sumitomo Mitsui Financial un 8,3% y Mitsubishi
UFJ Financial un 7,4%.
Japón recibió otro jarro de agua fría con el dato de
producción industrial, que retrocedió en febrero un 9,4% respecto al mes
anterior, la quinta caída consecutiva desde que se comenzó a calcular el
indicador en 1953 y tres décimas mayor de lo que esperaban los analistas. Esta reducción,
que llega después de la caída récord del 10% interanual de este indicador
registrada en enero, está motivada por la contracción de las exportaciones y la
demanda interna, según el Ministerio de Economía, Comercio e Industria nipón.
Asia
El sentimiento bajista se extendió en el resto de mercados
asiáticos. El indicador regional MSCI Asia-Pacifico perdió un 3,7%, tras cinco
sesiones consecutivas al alza que lo dejaron en su nivel más alto desde
diciembre de 2007. El Hang Seng de Hong Kong cedió un 4,5%.